El secretario de Seguridad Pública de Sinaloa, el general Genaro Robles Casillas, admitió que en la entidad se vive una situación crítica de inseguridad y violencia, con 391 homicidios dolosos y el robo de mil 755 vehículos en los primeros tres meses de este año.
El funcionario observó que priva un enfrentamiento entre grupos de la delincuencia organizada que pelean entre sí por el control de las organizaciones, de las rutas del tráfico de drogas y los territorios de venta al menudeo de las drogas.
Los mayores conflictos violentos se han focalizado en los municipios de Culiacán y Navolato, donde se trabaja con las fuerzas federales y la Procuraduría General de la República, encargadas de combatir a la delincuencia organizada.
Al desmenuzar el diagnóstico de los primeros 90 días al frente de la dependencia, citó que encontró un aparato de seguridad disfuncional, desmantelado, corrompido, con un elevado número de patrullas fuera de servicio y 2 mil 293 armas de cargo inservibles.
Robles Casillas explicó que según los criterios de organismos internacionales, por la población de Sinaloa, cercana a los 3 millones de habitantes, el número de policías necesarios es de poco más de 9 mil y se tiene un déficit 5 mil 283 elementos capacitados.
De una fuerza de 3 mil 762 policías preventivos que se tienen activos en la actualidad, sólo mil 912 cuentan con certificación, el resto no pasó los exámenes de control de confianza, por lo que está en marcha programas de reclutación de jóvenes aspirantes a policías.
El Secretario de Seguridad Pública del Estado señaló que se inició un programa de capacitación de policías en el centro de adiestramiento militar regional de Mazaquiahuac, en Nayarit, donde a la fecha mil 130 elementos ya cubrieron la capacitación.
Se requiere de policías con mayor capacitación y adiestramiento, con nuevos equipos, armas, patrullas y tecnología de punta que permita conocer la ubicación exacta de cada unidad, para responder en las reacciones necesarias, según comentó.
Dijo que en apoyo temporal a las corporaciones policiacas, 2 mil 200 elementos del Ejército, entre ellos mil 300 de la Policía Militar, realizan labores preventivas y otras tareas, entre ellas el combate al robo de vehículos que se ha disparado.
Los equipos militares de expertos en mecánica, tecnología y capacitación coadyuvan en la reparación de patrullas, la rehabilitación de las cámaras de video vigilancia y en la capacitación de los operadores del Sistema de Emergencia 911, comentó.
En cuanto al Centro de Emergencia y Respuesta Inmediata de Culiacán (CERI) reveló que de 236 cámaras de video vigilancia que operan, sólo 14 estaban en funcionamiento, por lo que el personal militar ha logrado elevar a 53 los equipos en funciones.
Se obligó a la empresa proveedora de los equipos de video cámaras respetar y cubrir el seguro que otorgó en su contrato, precisó.
Dio a conocer que en breve el Gobierno del Estado licitará la compra de 500 nuevas cámaras de video vigilancia, lo que vendrá a suplir la escasez de policías, en las ciudades de Culiacán y Navolato, donde se tienen los brotes más altos de violencia.
Con la evasión de los reos federales del penal de Culiacán, Juan José Esparragoza Monzón, “El Negro”, Jesús Peña González “el 20”, Alfredo Limón Sánchez, “El Limón”, Rafael Guadalupe Félix Núñez “El Chanquito Ántrax y Francisco Javier Zazueta Rosales “Pancho Chímale”, se dejó al descubierto la corrupción en el sistema penitenciario.
Los lujos con los que vivían en su reclusión en los módulos 5, 6 y 21 del centro penitenciario de Culiacán, motivó una investigación federal, de varios funcionarios separados de sus cargos y ex directores.
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