Alcaldes, dirigentes y simpatizantes del PAN y PRD tomaron el control total del Palacio de gobierno de Xalapa, Veracruz para exigir el pago de dos mil millones de pesos que adeudan a ayuntamientos por concepto de participaciones federales.
Los inconformes iniciaron su cuarto día de protestas en el interior de la sede del Poder Ejecutivo del Estado, donde suman 50 los presidentes municipales que se unieron a la toma del palacio.
El alcalde de Boca del Río, Miguel Angel Yunes Márquez, aseguró que no se retirarán hasta que la Secretaría de Finanzas les deposite los recursos que la administración de Javier Duarte de Ochoa "se robó descaradamente".
En un mensaje emitido en el interior de Palacio, el munícipe denunció que la gestión priísta quiere dejarle una bomba a la próxima administración que encabezará la alianza PAN-PRD, por lo cual advirtió que se mantendrán hasta que les paguen el cien por ciento de los adeudos.
El viernes pasado fueron 14 los alcaldes perredistas que se encerraron para el pago de 300 millones de pesos de participaciones federales atrasadas; pero para hoy lunes suman 50 los munícipes congregados en el interior demandando el pago de dos mil millones de pesos.
Los accesos a la sede del Ejecutivo fueron cubiertos por personal de seguridad del PAN y PRD, quienes deciden a quién dejar pasar y a quienes dejar fuera por considerar que no pertenecen al movimiento de protesta.
Funcionarios del gobierno del Estado difundieron en las ultimas horas que el Palacio de Gobierno fue tomado por ex oficiales de la extinta Policía Intermunicipal Veracruz-Boca del Río, afines al gobernador electo, el panista Miguel Ángel Yunes Linares.
"No somos porros no somos vándalos", respondió desde Palacio el hijo del mandatario electo y alcalde de Boca del Río, quien aseguró que no están
ahí por gusto sino porque el dinero que correspondía a los municipios de lo robaron funcionarios estatales.
Negó que vaya a haber ingobernabilidad en los municipios cuyos alcaldes se encuentran concentrados en Xalapa, pues consideró que la ingobernabilidad se genera por la falta de pagos salariales, de prestaciones e incluso de programas sociales.
"Esto es una desgracia social y humanitaria. No hay dinero para nada, eso está generando un colapso", afirmó Yunes Márquez.
En tanto, a las afueras de Palacio se concentraron decenas de simpatizantes de la organización Partido Cardenista, quienes demandan el pago de diversos proyectos productivos; así como también seguidores del PAN y PRD traídos de distintas regiones del estado.
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