Presuntos prestamistas de Michoacán usaron a un grupo criminal para cobrar a sus deudores con sus inmuebles, reveló la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
A través de un comunicado, la dependencia señaló que los supuestos integrantes de un grupo criminal se dedicaba a secuestrar a los morosos para obligarlos a que entregaran sus casas como pago.
Dio a conocer que, derivado de varias acciones de inteligencia, se aseguraron siete inmuebles que se habían obtenido a través de ese procedimiento en el municipio de Zamora.
Se trata de cinco casas y dos predios ubicados en las colonias Las Delicias, Valle Esmeralda, Jardines del Jericó, Colonia Ejidal Norte y 20 de Noviembre, las cuales, de acuerdo con los datos recabados por la Fiscalía Regional, fueron despojadas a sus dueños originales en 2011.
“Son inmuebles que fueron despojados a sus legítimos propietarios, a quienes privaron de la libertad a efecto de ceder sus inmuebles en pago de un crédito”, se indicó en un comunicado oficial de la PGJE.
Se informó que los trabajos de inteligencia se iniciaron a partir de varias quejas. “Estos hechos fueron denunciados recientemente ante la fiscalía por los afectados, por lo que la Fiscalía Regional acordó como medida cautelar el aseguramiento de inmuebles”.
La PGJE dio a conocer que las investigaciones continúan por parte de la Fiscalía Regional a efecto de lograr el esclarecimiento de los hechos y deslindar responsabilidades.
Advirtió que estas acciones no quedarán sin castigo y se dará con los responsables. “Todo hecho cometido al margen de la ley no quedará impune y llevará ante los tribunales a quienes atentan contra el patrimonio y seguridad de los michoacanos”, señaló.
Sin embargo, la dependencia no dio a conocer el nombre del grupo delincuencial al que presuntamente pertenecen las personas encargadas de cobrar los “créditos”, ni precisó si hubo detenidos por estas acciones.
Prestamistas en la mira. Acciones de este tipo se han reportado en otras entidades. En Yucatán, por ejemplo, en las últimas semanas ha ocurrido una ola de secuestros exprés.
Los plagios son efectuados principalmente contra personas o familiares de empresarios o gente adinerada, de acuerdo con fuentes de la Fiscalía General del Estado y de la Secretaría de Seguridad Pública, quienes señalan que las bandas podrían estar vinculadas a agiotistas, práctica que está prohibida en el estado, pero la solicitud de préstamos es una actividad común en la entidad.
De acuerdo con la información, los prestamistas entregan el dinero bajo el acuerdo de cobrar intereses muy elevados, los cuales en muchas ocasiones son impagables, por lo que los usureros buscan recuperar el dinero bajo presión y, como no pueden recurrir a la ley para exigir el pago, recurren al secuestro para cobrar las deudas, según las investigaciones en curso.