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El cuerpo de la reportera veracruzana Anabel Flores Salazar, quien fue levantada por un comando en el interior de su domicilio, apareció en el estado de Puebla con huellas de tortura.
Los restos de la comunicadora, quien cubría la fuente policiaca para el Sol de Orizaba, fueron localizados por autoridades de Puebla a la altura del kilómetro 1+580 de la carretera Cuacnopalan-Oaxaca.
La Fiscalía General de Veracruz informó que el cuerpo fue “plenamente identificado por sus familiares”, a quienes se les entregó luego de agotar los protocolos.
El cadáver de la mujer, quien vestía un pants gris, fue hallado en una zona poblana ubicada a aproximadamente 15 kilómetros de Veracruz, por lo que las autoridades anunciaron que colaborarán con la Fiscalía General de ese estado.
En Puebla se inició la carpeta de investigación 152/2016/TECAM y al ser identificada plenamente por sus familiares, la Fiscalía de Veracruz asentó la localización en el folio número 211/2016, iniciada con motivo de su desaparición.
La necropsia que se llevó acabo en el Servicio Médico Forense (Semefo) de Puebla indica que la causa de la muerte fue por “asfixia mecánica por sofocación”.
En tanto, la Procuraduría General de la República (PGR) inició un acta circunstanciada para coadyuvar en la investigación del caso.
La dependencia que encabeza la procuradora Arely Gómez dijo que será por medio de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos Contra la Libertad de Expresión (Feadle) como se coopere en la investigación de los hechos.
“La Feadle advierte que no cejará en su esfuerzo para el esclarecimiento de los hechos y la captura, en su caso, de los culpables de los ilícitos cometidos en contra de Flores Salazar”, enfatizó.
Explicó que por el momento ya se solicitó a Policía Federal Ministerial que se trasladen al lugar de los hechos de manera inmediata y localicen cámaras de videograbación y testigos de los hechos.
“Se pidió a la Fiscalía General de Veracruz que remita copia certificada del expediente que hayan iniciado con motivo de estos hechos”, informó en un comunicado.
La reportera fue sustraída la madrugada del lunes 8 de su domicilio por hombres armados.
Los hechos ocurrieron en la Unidad Habitacional Puerta Grande, del municipio de Mariano Escobedo, asentado en la zona montañosa central de Veracruz, región donde circula el Sol de Orizaba, perteneciente a la Organización Editorial Mexicana.
De forma paralela, las indagatorias para conocer las causas así como a el o los probables responsables de estos hechos siguen su curso en coordinación con las autoridades de Puebla, en el marco de los convenios existentes ente ambas entidades.
La familia se trasladó a la entidad vecina con el apoyo de la Fiscalía General del estado, con el acompañamiento del fiscal Especializado en Atención de Denuncias contra Periodistas y/o comunicadores, José René Álvarez Márquez, así como la Fiscal de Distrito de Orizaba, Clarisa Tapia Uría, y personal ministerial y pericial.
La Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas (CEAPP) condenó el asesinato de Flores Salazar.
“Lamentamos profundamente estos hechos que nos conmocionan, al igual que a los miembros del gremio periodístico y a la sociedad”, dijo el organismo en un comunicado.
Expresó sus condolencias y solidaridad a la familia Flores Salazar y les reafirmó su respaldo incondicional, tal y como lo han tenido desde la madrugada del lunes 8 de febrero.
“Exigimos a las autoridades encargadas de la Fiscalía General de Justicia el esclarecimiento de los hechos que rodearon la desaparición y posterior asesinato de la comunicadora, así como la identificación de todos los autores, materiales e intelectuales, del crimen para que sean procesados y castigados conforme a derecho”, manifestó.
