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Clínica de Periodismo
El comediante Tony Flores, de 65 años, dejó de ser visto en los escenarios para hacer reír a la gente desde que le diagnosticaron esclerosis lateral amiotrófica (ELA), el 10 de abril de este año.
Sin embargo, el imitador optó por la medicina alternativa en Los Ángeles y se sometió a un tratamiento a base de cannabis que no se puede fumar, ni oler, pues su uso es sólo para fines médicos.
Dicho tratamiento le ha dado grandes mejorías, ya que a los tres días de haberlo tomado logró dejar el oxígeno. Con 17 días de llevarlo a cabo, Tony ha mejorado notablemente.
“Los dolores típicos de ELA ya no los tengo, en dos meses estaré a un 75%. Ya hablo mejor, respiro mejor, mi piel está muy fuerte y es poco el tiempo que ha transcurrido”, afirma el cómico.
Después de haber dejado de actuar, desde el 24 de enero de 2015, ahora regresa al escenario con más fuerzas, cobijado por René Franco, para asistir a su show en vivo el próximo 28 de agosto en El Cuevón de Plaza Escenaria en la ciudad de México, haciendo el concepto sit down comedy.
“Me tiene animado, despierto, pero sí preocupado, nervioso y con insomnio, dentro de todo favorables”.
El público de Tony también lo ha apoyado a través de sus redes sociales, y lo alienta con sus oraciones, “Me asombra que sea tanta la gente que reza por mí”, dice agradecido.
Entre sus fans, su esposa, su familia y amigos han levantado al artista y lo han revivido.
Actualmente Tony Flores ya puede subir y bajar escaleras, pero no puede conducir ni usar la mano derecha, y está aprendiendo a usar la izquierda. “No puedo firmar cheques” dice entre risas y con sentido del humor.
Actualmente, ayuda a la gente que padece alguna enfermedad parecida a la de él, enlazándolos con la compañía de EU Green Hipocrates.
