Más Información
ana.pinon@eluniversal.com.mx
Doce jóvenes compositores latinoamericanos participaron en el Primer Taller de Composición para Flauta y Electrónica que organizó el Núcleo Integral de Composición (NICO) en enero del año pasado. Fruto de ese taller es el disco Flux, con el flautista Alejandro Escuer como solista.
A lo largo de un año, los estudiantes vivieron todas las etapas del proceso creativo de una obra electroacústica. Los compositores experimentaron la concepción, escritura, desarrollo de la electrónica, montaje, grabación, mezcla y producción final que se ven plasmados en un CD y un concierto. La grabación del disco se realizó en el estudio La Caja Acústica; será distribuido física y digitalmente por el sello Urtext Digital Classics y podrá adquirirse el día de la presentación.
“Es una propuesta electrónica interesante, propositiva, fresca, algunas obras son divertidas, otras más contemplativas. La combinación de electrónica con el instrumento ha resultado muy cálido, virtuoso y satisfactorio. El binomio funciona de forma extraordinaria. El disco reúne 12 obras que enriquecen el repertorio y el patrimonio musical mexicano de los últimos tiempos”, indicó en entrevista el flautista.
El músico explicó que cada pieza dura entre cinco y siete minutos, y son resultado del taller en el que participaron como maestros Enrique Mendoza, con clases de Composición; Esteban Chapela enseñó Procesamiento de Audio; Matemúsica estuvo a cargo de Enrico Chapela, además de clases magistrales de músicos internacionales, como Jos Zwaanenburg, Rodrigo Sigal, Pedro Rivadeneira y Felipe Pérez Santiago, y la asesoría del propio Alejandro Escuer.
“Trabajaron arduamente para confeccionar sus piezas, que además tienen la complejidad de haber tenido que involucrarse con las nuevas tecnologías de audio, con programas especializados. Hicimos sesiones con las flautas que tengo, algunas son únicas en México, los sonidos se utilizaron para armar la parte electrónica de las piezas, con las cuales tuve que interactuar en vivo. Es todo un acontecimiento musical de gran fuerza creativa e innovadora”, indicó Alejandro Escuer.
Las piezas generadas en el taller y sus autores son: “A little cloud”, de Juanra Urrusti; “Lux borealis”, de Ernesto Góngora; “Allá viene el silencio”, de Mateo Nossa; ”Las torres”, de Eduardo Partida; “La flauta negra”, escrita por Antonio Flores Castro; “One man crowd”, original de Josué Collado Fregoso; “T.A.B.U.”, de Pablo Mariña; “GAAP”, de Arturo Morfín; “Invocation III–Ehécatl”, escrita por Rodrigo Espino; “Timescape: paisajes temporales”, de Antonio Menéndez; “Borderline”, de Jean Ángelus Pichardo y “Electric rain”, original de Eugenio Casillas.
“Cada pieza tiene algo que decir, tiene esencia, algo expresivo y humano que compartir. No son piezas sólo para el divertimento, son realmente interesantes, con una gran carga emocional. En Flux estoy tocando diversas flautas, y la protagonista es la música electrónica, así como cada uno de los compositores”.
Añadió que los sonidos de electrónica pueden provenir de muchas fuentes, naturales o artificiales, que gracias a los compositores permiten la creación de metáforas sonoras. “Hay reflexiones sobre la naturaleza, pasajes urbanos y el hilo conductor es la flauta. Estoy muy contento porque este disco es el primero de la colección que estamos lanzando en colaboración con NICO y Urtext, que se llama Solistas de Ónix; la idea es que cada uno de los integrantes de Ónix Ensamble tenga su propio disco como solista, arrancamos con Flux”.
