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Luego de la escritura de A quién le importa el futuro de México. Las disyuntivas de México, el doctor Juan Ramón de la Fuente ya trabaja en un nuevo libro con el Seminario de Estudios sobre la Globalidad en la UNAM, del que también surgió Marihuana y salud.
En A quién le importa el futuro de México... ha llevado sus pasos a las familias de las víctimas de la violencia en Guerrero y, a partir de ese enfoque, escribirá una historia sobre la falta de un programa de atención a la salud mental producto de la violencia.
"Resulta que en México no tenemos un solo programa para atender la salud mental de los familiares de todas las víctimas, y si hay 180 mil mexicanos entre muertos y desaparecidos, pues hay 180 mil familias. ¿O qué el estrés postraumático sólo ocurre en Irak y en los veteranos de guerra norteamericanos? ¿Y qué nuestras poblaciones indígenas no sufren de estrés postraumático? ¿Y por qué no se está atendiendo?, ¿y por qué no se está haciendo nada?", señaló el ex rector Juan Ramón de la Fuente.
Durante la presentación de su libro A quién le importa el futuro de México. Las disyuntivas de México, donde De la Fuente estuvo acompañado por la escritora Elena Poniatowska y la periodista Adriana Malvido y que fue celebrada en el marco de la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, el ex rector contó que la idea surgió al ver las filas de madres indígenas que esperaban a que les tomaran muestras de sangre para ver si de esa manera podían ser hallados sus desaparecidos.
"Nos hemos ido a meter a Guerrero con un grupo de estudiantes de mi Seminario de Estudios sobre la Globalidad; estamos trabajando con víctimas, sobre todo con madres, que se han quedo viudas o han perdido a sus hijos como parte de esta guerra absurda. La idea surgió con Ayotzinapa cuando en la búsqueda de los cuerpos de los estudiantes empezaron a aparecer cementerios clandestinos, osamentas y fosas, una cosa horrorosa, terrible, y llegaron los forenses argentinos a tomar muestras para tratar de identificar esas osamentas, y entonces por la televisión vi largas filas de mujeres indígenas, muy pobres, que estaban allí para que les tomaran sangre y ver si alguna de las osamentas que estaban encontrando literalmente donde excavaban eran de sus familiares, a mí eso me dejó sin dormir", relató.
A los pocos días, durante las sesiones en el Seminario, Dení Álvarez Icaza le propuso ir a algunas de esas comunidades de Guerrero para comenzar sus estudios con víctimas de la violencia. "Pronto vamos a poder alzar la voz y decir aquí hay mucha gente que está muy necesitada de los programas del gobierno, de la ofensiva social del gobierno, en lugar de la absurda ofensiva militar, la ofensiva social con brigadas de salud que vayan a atender sus necesidades de depresión, de duelo no resueltas; sobre todo quienes tienen a sus familiares en calidad de desaparecidos, el duelo se atora, el duelo se atasca, se queda a medias, porque no encuentran la certidumbre total".
Eso también, dijo De la Fuente, es pensar en el futuro de México, al que se abocó en este libro publicado por Planeta, sobre el que Elena Poniatowska dijo que se trata de una obra fundamental para entender nuestro país, pues está escrito desde una mirada muy amplia.
"En México es común vivir 'en el día a día'. De ahí la pregunta que el médico y rector dispara a nuestra conciencia en su libro A quién le importa el futuro, y que respondemos al unísono: mientras existan intelectuales de la talla de Juan Ramón de la Fuente, México no será un país de poderosos mediocres", señaló la escritora y periodista.
sc