Inquietud en Canal 22
Ningún nombramiento ha llamado más la atención entre los anunciados este lunes para ocupar un cargo en la Secretaría de Cultura federal que el de Pedro Cota Tirado como nuevo director de Canal 22, principalmente al interior de la televisora. Nos cuentan que la llegada al canal cultural de quien fuera vicepresidente del club mexicano Necaxa y colaborador de Televisa, generó mucha sorpresa y desconcierto entre los propios colaboradores de la emisora. Entre ellos comienza a haber cierta incertidumbre porque en estos tiempos de austeridad, aseguran, lo que se necesita es a alguien que sea bueno, efectivo y ahorrador. Uno de los mayores temores, dicen, es que al funcionario, quien fuera director general de Marca País de la Oficina de la Presidencia de la República hasta diciembre, se le ocurra quitarle la importancia cultural al canal cultural mexicano por excelencia, como en su momento lo trató de hacer Raúl Cremoux, hecho que provocó cuestionamientos de la comunidad cultural y hasta protestas entre los trabajadores de la televisora. Por eso, nos dicen, es en el área de noticias donde comienza a haber mayor intranquilidad, pues sería la primera área donde se notaría cuáles son sus intenciones con el canal.
Cumple el Consejo Redactor: no entra la prensa
La segunda sesión de los integrantes del Consejo Redactor para la Iniciativa de ley de cultura se llevó a cabo como habían acordado sus integrantes: sin medios de comunicación. Las puertas del salón E del edificio G del recinto legislativo se cerraron a las 11:40 de la mañana de ayer después de que ingresó casi todo el grupo de asesores que se habían encontrado antes, en otra área, justo para acordar cómo se presentaría la información a los medios. Afuera del salón sólo permanecieron los diputados Santiago Taboada y Cristina Gaytán, y el doctor Raúl Ávila, quien en esta sesión fungió como representante del Consejo. Los tres reiteraron la dinámica acordada: sin prensa en el interior del salón, un breve diálogo con los medios al final de cada sesión para dar cuentas de lo que se hizo en el día y un comunicado de la Comisión de Cultura y Cinematografía. Entre el grupo de 13 integrantes sólo faltó Celso José Garza Acuña, secretario de Extensión y Cultura de la UANL, quien se había excusado de asistir; a través de una videoconferencia participó Carlos Villaseñor y la que no se vio por allí, aunque en su lugar estuvo Carlos Tejada, consultor de la oficina de la UNESCO en México, fue la maestra Nuria Sánz, directora y representante de ese organismo de Naciones Unidas en México, quien de origen había pedido que los encuentros no fueran cubiertos por los medios. Nos cuentan que en cambio sí estuvieron representantes del Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores de la Secretaría de Cultura que tampoco estuvieron de acuerdo con la política de puertas cerradas y que concluyeron: “Ya lo blindaron; no quieren hacer públicas las sesiones para que todo el mundo no vea sus choques”.
El FCE ya es grupo editorial
Aunque desde la pasada FIL de Guadalajara, el stand del Fondo de Cultura Económica (FCE) ya tenía en grande y mayúsculas el título GRUPO, ha sido más llamativo que en la invitación para el Homenaje Internacional a Ricardo Piglia, que congregó ayer vía streaming a estudiosos de la obra del escritor argentino convocados por las filiales de Argentina, Colombia, España y por supuesto México, la firma sea Grupo Fondo de Cultura Económica. Incluso en los paneles del Ajusco y en la página oficial de la editorial mexicana se señala que El Fondo es un grupo editorial en lengua española, asentado en México, con presencia en todo el orbe hispanoamericano, que fue fundado en 1934, tiene diez filiales en el mundo y que ha publicado más de 10 mil obras, de las cuales cerca de 5 mil se mantienen en circulación. Nos cuentan que en esa casa editora llegaron a la conclusión de que sí, son un grupo editorial fuerte y así se nombran ya.
