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El valor histórico de una fotografía, la catalogación, y la preservación de los archivos son parte de los temas que se discuten en el decimoséptimo Encuentro Nacional de Fototecas que se desarrolla en Pachuca, un encuentro que busca intercambiar ideas y proyectos entre investigadores, especialistas y fotógrafos.
Una fotografía es valiosa en el momento que hacen un aporte histórico. Si no hay éste, no hay nada, sentenció, el ponente Carlos Silva.
Pachuca es considerada como "La Meca de la fotografía en México", y en septiembre se viste de gala, al cumplir 40 años la Fototeca Nacional que se encuentra instalada en esta ciudad. Es en este marco que se lleva a cabo el decimoséptimo Encuentro Nacional de Fototecas, donde están presentes 26 de las 32 entidades del país.
Los trabajos de este encuentro comenzaron con la mesa dedicada a las imágenes de la Fototeca Nacional en la producción editorial, con la participación de Alberto Sánchez, Carlos Silva, Lilian Stein y Manuel Zavala y Alonso como moderador.
Durante su exposición, Carlos Silva presentó una serie de gráficas en las que se muestra el paso de la vida en México. En las playas de Topolobambo el general Lázaro Cárdenas se baña desnudó, "mi general en pelotas y sus acompañantes".
También compartió la fotografía que dijo le costó la carrera a Eduardo Pesqueira Olea, poniendo cuernos a Carlos Salinas. "El roñas", con cuernos a Fox, son retazos de la historia que se cuentan y se viven en una fotografía.
Sin duda manifestó que hay algunas que prevalecen por encima de otras, por el contexto y por lo que cuentan. Una fotografía es valiosa en el momento que hacen un aporte histórico. Si no hay éste, no hay nada, sentenció.
Las que se quedan en la memoria y en el imaginario colectivos, precisó son muchas pero tal vez por la historia misma o a fuerza de verlas son dos. La entrada de Madero a la Ciudad de México y la lectura del discurso de Lázaro Cárdenas por la expropiación petrolera.
Pero la fotografía no ha escapado a la masificación de las imágenes, a la tecnología con programas de edición o bien al internet, precisó Lilian Stein, quien lamentó el uso inadecuado de las imágenes y la falta de rigor para catalogarlas y acreditarlas.
Los ponentes coincidieron en que hay un problema serio ya que la ciudadanía se confunde y no puede identificar entre uno y otro personaje de la historia. Esta es la tarea y el reto de los divulgadores.
Para el director del Sistema Nacional de Fototecas (Sinafo), Juan Carlos Valdez Marín, esta decimoséptima edición es la oportunidad de intercambiar información y proyectos entre los participantes, de conocer dónde se debe trabajar.
Las fototecas son espacios donde se encuentra una muestra clara de las diferentes fases por las que ha pasado México y es obligación de todos poder preservarlas.
En el caso Pachuca señaló, se encuentra el acervo fotográfico más importante del país, ya que resguarda alrededor de 900 mil piezas que, agrupadas en 46 fondos, representan el trabajo de más de 2 mil autores y cubren casi 170 años de historia.
"Hay quien llama fototeca únicamente a un reservorio de fotografías, que es la definición, pero nosotros estamos al servicio del usuario y eso nos compromete a que la gente vea y comprenda que la fotografía es un patrimonio colectivo de memoria de una sociedad ".
El Encuentro Nacional de Fototecas termina este día con una conferencia sobre los 40 años de memoria fotográfica por el aniversario de la Fototeca Nacional.
nrv