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La compañía estadounidense de alimentos Kraft Heinz Co realizó una oferta de 143 mil millones de dólares por Unilever en un esfuerzo por construir un gigante global de artículos de consumo masivo, aunque fue rechazada este viernes por el fabricante del té Lipton y el jabón Dove.
Una combinación de ambas sería la tercera fusión más grande en la historia y la mayor compra de una compañía británica, según Thomson Reuters, un hecho que causó preocupación en Gran Bretaña por puestos de trabajo.
El acuerdo con Unilever integraría a la mayonesa Hellmann’s, los helados Ben & Jerry’s y las sopas Knorr a una cartera de productos que incluye la catsup Heinz y al plato de macarrones con queso de Kraft.
Aunque Kraft Heinz Co, que es controlada por el multimillonario Warren Buffett y la firma de capitales privados 3G Capital, dijo que esperaba hablar sobre los términos del acuerdo, Unilever afirmó que no veía una razón para discutir sobre un trato sin ventajas financieras o estratégicas.
Kraft tiene hasta el 17 de marzo para hacer una oferta final por Unilever bajo las normas de fusión.
Las acciones de Unilever subieron a un récord luego de las noticias de la oferta y cerraron con un alza de 15%.
La propuesta de Kraft considera el pago de 30.23 dólares por acción en efectivo —cancelado en dólares estadounidenses— y 0.222 acciones de una nueva firma por cada título actual de Unilever, de acuerdo a esta última.
De esta manera, la oferta implica una prima de 18% con respecto al precio de cierre de las acciones el jueves.
Unilever tiene una mayor presencia que algunas de las empresas del ramo en mercados emergentes, otrora grandes impulsores del crecimiento de la industria, pero que se ha ralentizado en los últimos años.
También está sintiendo los efectos de la decisión británica de abandonar la Unión Europea, con una caída en la libra que eleva el costo de producir mercaderías en Reino Unido y tensa las relaciones entre los minoristas y proveedores en el país.