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La Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la empresa española Iberdrola dieron a conocer, de manera separada, la adjudicación de un contrato para construir y operar una central de ciclo combinado en el estado de Sinaloa, pero con montos de inversión que difieren considerablemente.
La información presentada por ambas empresas difiere en inversiones comprometidas para la nueva central en una cifra cercana a 65 millones de dólares; mientras que CFE sostiene que van a ser 334.5 millones, Iberdrola argumenta que son 400 millones.
Mediante comunicados por separado, CFE sostiene que la propuesta de la empresa Iberdrola Generación México fue la mejor oferta técnica y económica en la licitación.
“La inversión estimada es de 334.5 millones de dólares y representa un ahorro de 49% respecto al presupuesto original de la CFE para el proyecto”, sostiene la empresa productiva.
La central se va a localizar en el municipio de Ahome, Sinaloa y se trata de una central de ciclo combinado con capacidad de “778 megawatts+/-15%”, que se va a desarrollar bajo la modalidad de productor independiente de energía y que operara con gas natural como combustible.
Su objetivo, añade la CFE, es satisfacer la creciente demanda de energía eléctrica en el occidente del país.
Al mismo tiempo, la oficina representante de Iberdrola en México dio a conocer que la española se adjudicó un nuevo gran proyecto de generación de energía eléctrica en México; la central de ciclo combinado de noroeste, que tiene una capacidad de 887 MW y que requiere “una inversión de 400 millones de dólares”.
La central entra en funcionamiento en 2019 y va a generar eléctricidad equivalente al consumo de más de 3 millones de mexicanos, dijo.
Con este proyecto, que se suma a la reciente adjudicación de la central de ciclo combinado de Escobedo en Nuevo León, Iberdrola va a contar en 2019 con una potencia instalada de unos 8 mil MW, añade la compañía Ibérica.
Iberdrola, que es la encargada de la construcción, puesta en marcha, operación y mantenimiento de esta planta de generación, además de ser su propietaria, va a vender toda la energía que produzca desde esta instalación a la CFE mediante un contrato a 25 años, con cargos fijos de capacidad y cargos por energía.
La tecnología que se instala en la Central de Noroeste es de última generación con base en turbinas de gas modelo M501J, del fabricante japonés Mitsubishi Hitachi Power Systems.
Junto a la construcción de la planta, Iberdrola va a poner en marcha todas las instalaciones asociadas necesarias para su conexión al sistema eléctrico.
Iberdrola dispone en México de proyectos de generación de energía en construcción que suman cerca de 2 mil millones de dólares de inversión, adicionales al proyecto de noroeste.
