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Debido a las menores participaciones federales en 12 mil millones de pesos reportadas en el primer bimestre del año, los estados van a tener que recurrir al Fondo de Estabilización de los Ingresos para las Entidades Federativas (FEIF) para compensar los recursos, dijo el coordinador de la Comisión Permanente de Funcionarios Fiscales (CPFF), Aunar Agustín de la Rocha Waite.

En entrevista con EL UNIVERSAL, el representante de los secretarios de finanzas de los estados explicó que el FEIF, que cuenta con 39 mil 385 millones de pesos, va a entrar a cubrir el faltante de enero y febrero.

Dijo que si bien se prevé que en abril-mayo van a mejorar los recursos por participaciones, es necesario que los gobiernos locales ajusten su gasto, pues no se tiene certidumbre de lo que va a suceder en 2017.

“Hay que ser prudentes y prever lo que viene hacia delante con base en los Precriterios Generales de Política Económica para 2017; es decir, qué también nos tendremos que apretar el cinturón y para ello hay que revisar el gasto de operación”, advirtió.

Pero sobre todo procurar mantener los niveles de inversión porque eso genera crecimiento y empleos, consideró el funcionario.

Consideró necesario seguir con el proyecto de Presupuesto Basado en Resultados porque al final de día esa es la tendencia para destinar de mejor manera los recursos en los programas que salgan mejor evaluados y aplicar correctamente la nueva Ley de Disciplina Financiera para las Entidades Federativas (LDFEF).

Aunar Agustín de la Rocha Waite, quien también preside el grupo de trabajo de deuda dentro de la CPFF, destacó que la LDFEF fue una ley en la que todos los estados participaron.

“Los secretarios de finanzas tenemos que ser muy prudentes y prever los escenarios en 2017 y 2018, sobre todo 2017, vamos a ver qué pasa porque dependemos a veces de la economía mundial, pero lo que podemos ir haciendo es ajustarnos”, advirtió.

Seguro catastrófico. Adelantó que los estados están impulsando un programa de aseguramiento conjunto para reducir los costos de los efectos de los desastres naturales.

“Se está trabajando con el apoyo de la Federación para la adquisición de los seguros catastróficos entre varias entidades para que sea más baratos, en lugar de estar pagando 40 o 50 millones que cuesta anualmente se puede bajar”.

Y por otro lado están con la Secretaría de Gobernación realizando el estudio de gestión integral de gestión de riesgos para hacer un inventario de todos los bienes públicos susceptibles de sufrir un desastre natural, sea un sismo, inundación o huracán.

Señaló que si bien en el Fonden los estados ponen 50%, al final del día los estados deben comprar un seguro con base en estudios.

Para ello están analizando la posibilidad de generar un fideicomiso mediante el cual se pueda adquirir el seguro. “Es un ejercicio muy interesante que espero que se pueda consolidar”, apuntó.

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