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Hace un par de semanas, Armando Uriegas, director general de Nielsen México, se reunió con un fabricante del sector consumo de Monterrey, y en ese encuentro detectó una pregunta constante por parte de los empresarios: ¿cuánto deben aumentar los precios de sus productos este año?
En entrevista con EL UNIVERSAL, el directivo estima que un incremento de precios en niveles cercanos a la inflación (3%) permitiría continuar con el dinamismo de las ventas de tiendas de autoservicios, de conveniencia y tiendas tradicionales este año; sin embargo, realizar aumentos de 6% podría provocar una desaceleración del mercado.
“Si los incrementos de precios se dan de manera acelerada, digamos 100% o 200% por arriba de la inflación, en niveles de 5% o 6%, en ese momento el consumidor tendría ligeros ajustes en sus hábitos de consumo”, explica Uriegas.
El consumidor podría migrar a productos más baratos, empaques más pequeños y eso podría empezar a dar las bases de una desaceleración, señala.
Según datos de Nielsen México, una canasta de productos que incluye 130 categorías como golosinas, belleza, higiene, alimentos y bebidas, tuvo en 2015 un incremento de 4% en volumen y 7.3% en valor, lo que fue considerado como positivo y un año de recuperación, luego de un nulo crecimiento en 2014.
“La interpretación es que los fabricantes no transfirieron por completo el impacto de la devaluación en sus precios hasta el cierre del año pasado. De alguna manera, las empresas absorbieron el golpe de la devaluación (del peso frente al dólar)”, señala Uriegas. Si se suman los decrementos de tarifas energéticas, el consumidor no se vio tan impactado, afirma.
Otro tema destacable fueron las remesas, las personas con un alto nivel de dependencia sobre esos recursos tuvieron mayor consumo interno.
Este año se prevé similar al anterior, con crecimientos moderados, muy alineados al Producto Interno Bruto (PIB), dice.
Un factor a considerar es el precio del petróleo, pues hay un alto número de personas que trabajan en esa industria, y si Campeche o Veracruz tienen menos empleos, es posible esperar una desaceleración de las tasas de crecimiento del consumo.
Más tienditas. Cada año, Nielsen México realiza un ejercicio de estimación del número de tienditas de esquina existentes en el país. En 2016, la investigadora de mercado prevé un aumento de 14 mil
En 2013 se estimó que había 936 mil 344 tiendas tradicionales, que un año después cayeron a 915 mil 015 y el año pasado terminó con 930 mil 147 puntos de venta.
“El canal tradicional tiene una alta dependencia de categorías de mucha tradición como gaseosas, golosinas, alimentos, botanas, y estas categorías han tenido un buen comportamiento, el canal tradicional está registrando una recuperación”, destacó.
Este segmento ha crecido históricamente en alrededor de 1% anual en términos de establecimientos, por lo que se prevé que se mantenga.
