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Especialistas anticiparon un escenario complicado para el paquete económico 2017, con un recorte drástico al gasto y esfuerzos para estabilizar la deuda que colocan a México en el peor de los mundos.
Durante el foro internacional El poder legislativo y su rol frente al proceso presupuestario organizado por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP) de la Cámara de Diputados, en donde se presentaron dos propuestas para crear una oficina parlamentaria de presupuesto y para que la ciudadanía participe en este proceso, advirtieron que se van a tomar decisiones difíciles.
El director del Centro de Estudios Económicos y Presupuestarios (CIEP), Héctor Villarreal, dijo que luego de que las calificadoras nos sacaron tarjeta amarilla, no se ve una discusión sencilla porque puede haber afectaciones en el gasto en salud.
La coordinadora del programa de gasto de México Evalúa, Mariana Campos, coincidió con el legislador en que con la perspectiva negativa de la calificación crediticia, no hay espacio más que para una propuesta presupuestaria conservadora.
“El año pasado hubo más discurso que recorte al gasto, por eso ahora será clave revisar los ajustes”, dijo.
Ahora no importa tanto la discusión sino la ejecución del presupuesto, porque hay grandes diferencias entre lo aprobado y lo ejercido, apuntó la especialista.
El coordinador ejecutivo de investigación del Instituto Belisario Domínguez, Gerardo Esquivel, alertó que con la preocupación de la deuda y la austeridad en el gasto “estamos en el peor de los mundos. Llegamos a un paquete en momentos en que estamos endeudados y una pésima calidad del gasto público, es decir, con una camisa de fuerza”, sentenció el investigador.
Así no hay margen para que salga algo distinto en el Congreso, remató el experto.
Eliminar discrecionalidad. En ese contexto, diputados y organizaciones de la sociedad civil plantearon que debido a que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público perdió credibilidad en el manejo de la deuda y hace reasignaciones al gasto discrecionales, es necesario elaborar un contrapeso a través de la creación de una oficina parlamentaria de presupuesto en el Congreso.
En la inauguración del Foro respaldaron la propuesta para impulsar una mayor participación de la ciudadanía en el proceso presupuestario.
Consideraron necesario reformar la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria (LFPRH), según expuso la diputada del PAN, Minerva Hernández, quien consideró que el punto de partida es el tema de la corrupción.
Alejandro González Arreola, del Colectivo Por un Presupuesto Sostenible (Peso), hizo un llamado para que sea durante este periodo de sesiones y para que se consideren las dos iniciativas.
Debilidad institucional. Mariana Campos afirmó que las propuestas obedecen a que hay una debilidad institucional para controlar la trayectoria del déficit en momentos en que se puso a la deuda en perspectiva negativa y en donde ha estado ausente la discusión fiscal en el Congreso de la Unión.
El director de análisis de la oficina parlamentaria de presupuesto de Canadá, Jason Jacques, mencionó las dos claves para el éxito para impulsar la iniciativa en México: “Que lo dirija un verdadero líder, con la participación de todos los partidos y que se maneje con transparencia”.
Rubén Catalán, especialista de Chile, consideró que no se debe replicar “con un copy paste”, sino tener características propias.
Sin credibilidad. El diputado Vidal Llerenas, planteó necesario preguntarnos cómo fue que se duplicó la deuda pública y en qué se gastó.
“Hay una apartado de inversión de alto impacto que no se especifica qué es y que nos ha llevado a un mayor endeudamiento a lo aprobado por el Congreso”, acusó.
Afirmó que el gobierno no tiene credibilidad en materia de deuda y el Congreso de la Unión no ha cumplido con su responsabilidad para vigilar, aunque existe la Auditoría Superior de la Federación.
El presidente del comité del CESOP, diputado Gerardo Cuanalo, afirmó que de haber tenido una oficina parlamentaria de presupuesto se hubiera evitado el endeudamiento público que es el más alto que se ha tenido en la historia moderna.
