Cinco años pasaron para que el boxeador mexicano Rey Vargas se ciñera un nuevo campeonato del mundo, de nuevo avalado por el Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
Atrás quedó el supergallo que nunca perdió, ahora presume el trofeo que le arrebató hace unos días a Mark Magsayo en San Antonio, Texas. Vargas es el nuevo rey de los plumas y lo disfruta como la primera vez.
“Andamos con un nuevo nene en casa, un nuevo bebé en verde y oro. El primer cinturón fue el despunte para caminar, subimos a otra plataforma y ahora estamos de nuevo ahí. Ya solo esperamos que termine de cerrar la ceja para poner fecha a la que viene”.
Ser campeón otra vez motiva a Rey a seguir haciendo historia, trabajar para que se reconozca lo que ha logrado, pues lamenta que no se han dimensionado hasta ahora sus logros.
“A lo mejor no se ha reconocido por completo, pero 36-0 con dos campeonatos mundiales es un récord que no cualquiera lo tiene. Me decían que era algo que solo había hecho Julio César Chávez , son niveles altos y quiero seguir ahí, haciendo historia”.
Y es que no se imagina en otro mundo que no sea el boxeo. “Es mi estilo de vida desde que recuerdo. No sé qué sería, tal vez un profesionista, tal vez un ‘bueno para nada’, un vago”.
Algo que no pasará, todo lo contrario, quiere ser recordado como un gran campeón. “Si ganamos una tercera y una cuarta corona siento que vamos a ser recordados como algo diferente de lo que se ha hecho”.
Aún con los estragos en la ceja izquierda de la riña que lo regresó a la gloria, el púgil nacido en Otumba, Estado de México, confía en volver al ring antes de que el año expire. Quiere enfrentar a Leo Santa Cruz , unificar campeonatos, pero es una negociación difícil de amarrar. "Estamos en negociaciones, a la espera”.
Lo que tiene bien claro es que solo le interesa un rival de esa altura. “Llegamos a un nivel donde necesitamos rivales de ese porte, no minimizo a nadie porque todos venimos empujando desde abajo, pero tengo mucho que perder y nada que ganar en ciertos puntos, entonces necesitamos un rival con el que se gane o pierda, pero del mismo nivel”, sentencia.