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Ahora sí. Los Yankees de Nueva York amarmaron un trabuco para 2018. Potencia en plato y precisión sobre el montículo.
Si Aaron Judge, novato del año, no era suficiente para los del Bronx, la contratación de Giancarlo Stanton, Jugador Más Valioso de la Nacional en 2017, fue el primer golpe de autoridad sobre la mesa de la novena neoyorquina.
El pasado octubre, los Yankees se quedaron a una victoria de la Serie Mundial. Cayeron en el séptimo juego de la final de la Americana frente a los Astros de Houston (que acabarían coronandose ante los Dodgers de Los Ángeles).
Nueva York no es una ciudad que permita perder. Ese sabor amargo de la derrota es despreciado por los miles de seguidores en la Gran Manzana. La respuesta no tardó mucho en llegar, Stanton firmó con los máximos ganadores de Grandes Ligas un par de meses después.
El pelotero se une a un line up con nombres que pondrían nervioso a cualquier lanzador. Con veteranos como Brett Gardner y Aaron Hicks, la lista mantiene a otros jóvenes que ya demostraron su capacidad para volar las bolas, como el mismo Judge, Gary Sánchez y Greg Bird.
La incógnita quedará en el nuevo manager de los bombarderos, Aaron Boone, quien remplazará a Joe Girardi en los controles. Se desconoce sus habilidades para controlar grandes egos dentro de los vestidores.
En las oficinas de Nueva York habrá un trabajo extra para la administración. En el traspaso de Gianarcarlo, deberán pagarle lo que tenía acordado con los Marlins de Miami. En 2015, el californiano firmó un contrato de 325 millones de dólares por 13 años, de los cuales ya recibió 30. Yankees debe pagar el resto, mínimo, hasta 2020, cuando el jugador puede dar las gracias a la novena.
Otro movimiento forzado por la llegada de Stanton (168 hits, 59 homeruns y 132 carreras impulsadas en 2017), es su acomodo en la defensiva. Existe el debate de quién debe de ser el bateador designado, Giancarlo o el Juez (154 imparables, 52 cuadrangulares y 114 carreras impulsadas). Se especula que sea la nueva contratación quien se acomode en esa posición, mientras Aaron Judge se mantendrá en el jardín derecho y Gardner en el izquierdo.
La rotación de los pitchers será muy similar a la de 2017. Con Luis Severino, Masahiro Tanaka, CC Sabathia, Sonny Gray y Jordan Mont- gomery. Dentro del bullpen, Aroldis Chapman repetirá como el cerrador de confianza.
Como cada año, los Yankees llegan con la obligación de destacar. Para 2018 —con el equipo que armaron—, la exigencia de ser campeones de las Mayores, aumenta.
Los neoyorquinos no llegan a la Serie Mundial desde 2009, misma campaña de su último título.
El equipo al que deberían vencer en la hipotética lucha por el título deberían ser los Dodgers.
