El brote de la pandemia de Covid-19 en Estados Unidos ha dejado en incertidumbre económica a las jugadoras de la liga femenil que paga los mayores sueldos del mundo, la Womens National Basketball Asociation (WNBA ), cuando ésta vivía el momento de mayor estabillidad en su historia y empezaba a hacerse un espacio en la oferta de los deportes más vistos en ese país.
La Liga promediaba a sus 144 jugadoras empleadas un sueldo de 74 mil 759 dólares por campaña, según el estudio Global Salaries Survey.
Esa cifra le permitía superar, por al menos 18 mil dólares anuales a los salarios que otras ligas devengaban a sus jugadoras, como la Super Netball australiana (una especie de baloncesto que se juega en aquel país) o la D1 Femenine, la liga femenil del futbol francés.
Pero ahora con la pandemia del coronavirus, el oasis salarial que había logrado la WNBA se encuentra en serio riesgo.
“Es difícil decir hasta qué grado estará afectada la liga económicamente, pero podría ser más difícil que todos sus involucrados se recuperen de esto, en comparación de otras grandes ligas”,
menciona Rebecca Lobo, comentarista de la liga por la cadena ESPN.
Lobo se refiere a que muchas de las jugadoras utilizan la temporada baja de la liga para jugar en algunos países de Europa. Con el Covid-19 afectando a Europa y Estados Unidos primordialmente, las ha dejado con pocas opciones para percibir dinero, al menos, este año.
La Liga también está en una etapa de incertidumbre económica, debido a que hay riesgo de que se empalme con los Playoffs de la NBA, si es que ésta última los reacomoda en el verano próximo.
La WNBA vería amenazados sus ingresos por concepto de publicidad, como la misma NBA ya está en esa posición.
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