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El rugido de las ruedas sobre el concreto o la duela que provocan múltiples vibraciones en los skaters que van sobre una tabla de madera y el público que lo admira, tendrá difusión olímpica cuando se estrenen en los Juegos de Tokio 2020.

Con el ciclo olímpico ya en marcha, veteranos mexicanos de esta disciplina extrema impulsan el crecimiento del nivel, a falta de apoyos del gobierno.

Para Max Barrera, tapatío que ha dedicado 30 años de su vida al skate, la iniciativa privada es la única que se compromete para que los patinadores tengan mayor número de competencias para foguear a la nueva camada que representarán a México en Tokio.

“La verdad es que el apoyo que se da está por abajo del mínimo que tienen otros países donde el skate ya fue adoptado no sólo como un deporte, sino como un movimiento de vida. A veces anuncian la construcción de parques para patinar, pero no son suficientes ni tienen muchas veces las condiciones para realizar una buena práctica”, dijo Barrera.

En los últimos años, los gobiernos de la Ciudad de México y de algunos otros estados, construyeron parques para la práctica del skate, aunque para Barrera son insuficientes si en un futuro se quiere alcanzar los escalones donde están Brasil, Chile y Argentina, los más aventajadas en Latinoamérica.

“Los patrocinadores son los que siguen manteniendo los torneos en los que los chavos ganan el dinero que les ayuda para continuar patinando”.

Uno de los circuitos más importantes lo organiza Vans, con el Royal Side, que este año tiene cuatro paradas y una final con 100 mil pesos al primer lugar.

“Como veterano, en lo que ahora estoy interesado es en ayudar y brindar las facilidades para los skaters que ahora están empujando, para que tengan las cosas que no tuve en mis inicios. Los Juegos Olímpicos serán vistos por millones de personas y eso creo que ayudará para que el deporte crezca aún más”.

En 2017 el certamen vio competir a 300 participantes a lo largo de seis eliminatorias en distintos estados del país para llegar a la final en donde Jorge Soto Weeman se proclamó campeón.

Se espera que en la edición 2018 se pueda dar seguimiento a los posibles integrantes de la selección que tengan posibilidades de representar a México en Tokio 2020 y seguir construyendo rumbo a París 2024.

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