La gimnasta estadounidense Simone Biles, junto a McKayla Maroney, Maggie Nichols y Aly Raisman denunciaron este miércoles la inacción de las autoridades deportivas y de la policía federal para prevenir las agresiones sexuales cometidas por el exmédico del equipo femenino de los Estados Unidos, Larry Nassar, en atletas jóvenes durante dos décadas.
"Nos han defraudado y nos deben explicaciones
", declaró Biles ante la Comisión Judicial del Senado encargada de examinar los "fallos" de la investigación.
Simone Biles
fue clara en su denuncia y no sólo culpó al exmédico, " Hago responsable a Larry Nassar y hago responsable a un sistema entero que permitió y perpetró estos abusos, la Federación Estadounidense de Gimnasia y el Comité Olímpico Estadounidense ", mencionó la gimnasta de 24 años de edad.
La investigación se cerró en septiembre y ocho meses más tarde se necesitó otra denuncia para concluir una nueva investigación.
La exgimnasta McKayla Maroney centró su declaración hacia la oficina local del FBI quien tomó su testimonio, sin embargo " No hizo una investigación , sino que cuando (los agentes federales) finalmente hicieron un informe 17 meses más tarde, hicieron declaraciones falsas sobre lo que había dicho". Maroney sufrió el ataque cuando tenía 13 años de edad.
Aly Raisman,
quien reveló que había sido atacada a partir de 2010, denunció a Larry Nassar en 2015 a la Federación, aunque " el FBI tardó 14 meses en contactarme a pesar de mis numerosas peticiones de testificar", dijo la exatleta de 27 años.
Maggie Nichols,
de 24 años de edad y primera en declarar que había sufrido abusos sexuales, dijo que estaba "obsesionada con el hecho de que, incluso después de haber denunciado mis ataques, tantas mujeres y niñas sufrieron".
Ante estas acusaciones el director del FBI, Christopher Wray, pidió disculpas a las víctimas de Larry Nassar , admitiendo que "los errores fundamentales cometidos en 2015 y 2016 nunca debieron haber existido".
Larry Nassar,
de 58 años, cumple una condena de cadena perpetua después de haber sido condenado a varias sentencias severas en 2017 y 2018 por agresiones sexuales a más de 250 gimnastas, en su mayoría menores, cometidas en la federación de gimnasia, en la Universidad estatal de Michigan y en un gimnasio en Lansing donde trabajaba.