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La NBA suspendió dos partidos a Trevor Ariza y Gerald Green, de los Rockets de Houston, luego de protagonizar una pelea en el vestidor de los Clippers de Los Ángeles.
Los otros elementos de la quinteta de Houston, Chris Paul y James Harden, no enfrentarán sanciones ni multas por sus papeles de “pacificadores”, señaló la Liga en un comunicado.
Del lado de los Clippers, Blake Griffin tampoco tendrá una penalización por el contacto contra el entrenador de Rockets, Mike D’Antoni, según fue acusado por los basquetbolistas de Houston.
Las sanciones para Ariza y Green son sin goce de sueldo, por lo que dejarán de percibir 103 mil y 19 mil dólares, respectivamente.
“Entraron al vestuario de los Clippers para enfrentar a algunos de sus jugadores”, dijo el vicepresidente de operaciones de la NBA, Kiki VanDeWeghe.
“En circunstancias como esta, fue agresivo. Fueron dos equipos los que realmente decidieron entrar. Ir al vestuario de otro equipo inmediatamente después de un juego es totalmente inapropiado y muy provocador para que los jugadores lo hagan, y eso es una situación peligrosa”, añadió.
La NBA entrevistó a más de 20 personas y descubrió que Ariza y Green fueron culpables.
Antes de la sanción ambos negaron lo ocurrido.
Una fuente reveló a la Liga que ambos basquetbolistas trataron de increpar a Austin Rivers.
Los Clippers, que celebraban en su vestuario, detectaron que cuatro jugadores de Rockets estaban junto a ellos.