Más Información
Elección judicial: 65% de aspirantes son hombres; Comité de Evaluación del Poder Legislativo busca paridad de género
Ssa firma convenio para reconocer atención a la violencia sexual como emergencia médica; busca prevenir la revictimización
Se requieren mayores recursos en el Presupuesto 2025 para mejorar escuelas, asegura SNTE; destaca certeza laboral para maestros
UNAM y AAPAUNAM instalan mesa de negociación para revisión salarial; entrará en vigor en febrero de 2025
Personas de otros partidos pueden sumarse a Morena: Luisa Alcalde; la meta es tener 10 millones de afiliados
La primera vuelta la dio con el grupo, normal, esto apenas comenzaba en los 20 kilómetros de marcha varonil, pero a eso de la tercera algo ocurrió con Moacir Zimmerman , competidor brasileño de 35 años…
Comenzó a perder posiciones. Comenzó a perder velocidad. Vio cómo, poco a poco y rápidamente los punteros se alejaban de él, y se quedaba solo, solo, sin nadie atrás.
Alto, muy alto, de zancada amplia y de facciones duras que lo hacen lucir más viejo que sus 35 años de edad, Zimmerman se ha distinguido en su país no por ser un competidor muy ganador, pero sí lleno de polémica. Antes de los Juegos denunció un supuesto complot de ciertos directivos para que no viajara a Perú.
Pero al final llegó a Lima. Pasaban las vueltas y Moacir seguía en las mismas. Pasaban los chilenos, los venezolanos, los argentinos, los peruanos, hasta un perro que se metió en la pista y él, cómo si nada. Seguía a su ritmo, sin cansarse de más, eso parecía, sin sudar de menos, aunque ya estaba empapado si no por el esfuerzo, sí por la llovizna con la que despertó al ciudad de Lima.
Los punteros de la competencia le sacaron hasta once minutos de ventaja.
Ya hasta lo habían rebasado en un par de ocasiones.
Lo que le quedaba al pobre Moacir Zimmerman, era cada vez que le pasaba frente, gritarle aliento a Caio Oliveira, quién iba entre los punteros y al final quedó en segundo lugar, ganó la plata.
Daniel Pintado de Ecuador, terminó los 20 kilómetros en 1.21’51’’. Todos los demás competidores acababan detrás de él, con una vuelta de desventaja.
Pero Zimmerman
no. Ya todo los competidores habían acabado y él seguía caminando. Pintado, el ganador, ya estaba en el dóping y él seguía marchando; Zimmerman daba su enésima entrevista y él seguía en competencia.
Hasta que… al fin termino. 1.33’14’’. Once minutos, 23 segundos más que el primer lugar. “Fue un día muy complicado”, dice al terminar… “Pero acabé, mucha fuerza mental”, alcanzó a mencionar mientras los voluntarios lo llevaban a descansar…
Así acabó la prueba de Moacir Zimmerman , último lugar de marcha 20 kilómetros…