Para que María del Rosario Espinoza pudiera prolongar su carrera hasta el verano de 2020 , cuando planea disputar sus cuartos Juegos Olímpicos , necesitó de un plan en el que participara en pocos eventos, para que su cuerpo no sufriera tanto desgaste, debido a su edad (31 años), pero que a la vez le permitiera no perder puntos en el ranking mundial y pensar en llegar a las magnas justas.
Diseñó un plan con sus entrenadores para competir sólo en eventos puntuales, como Campeonatos Mundiales, Grand Prix , entre otros, para que su cuerpo no se desagastara como en los ciclos olímpicos pasados.
No era una estrategia original. Esa misma planificación la habían hecho tenistas como Roger Federer y Rafael Nadal , quienes han dejado de participar en temporadas de arcilla o pasto, para tratar de darle descanso a su cuerpo.
A ambos les funcionó. Ganaron títulos y sus carreras se han prolongado. Lo mismo le ha pasado a Espinoza . Desde que terminaron los Juegos Olímpicos de Río , participó en 11 eventos y en 10 subió al podio, incluidos los Mundiales de Taekwondo de 2017 en Muju , y Manchester 2019 , en los que obtuvo medallas de bronce y plata.
“ Mi cuerpo ya no se recupera como antes, ya no tengo 20 años”, dice Espinoza. “Esto lo hago por ser una de las mejores deportistas del mundo, para dejar un legado”, reconoció.
María
es la segunda deportista mexicana más ganadora de todos los tiempos en Juegos Olímpicos . Cuenta con una medalla de oro, una de plata y una de bronce y sólo es superada por el fallecido clavadista Joaquín Capilla , quien ganó cuatro preseas, también en tres magnas justas diferentes.
Si la sinaloense sube al podio en Tokio se convertiría en la primera atleta mexicana en hacerlo en cuatro Juegos Olímpicos diferentes y será la máxima ganadora de metales en las justas veraniegas desde que el taekwondó está en el programa olímpico.