Pueden estar los cinco mejores profesionales del mundo en el mismo campo, pero Lorena Ochoa se sigue robando el show.
La máxima golfista de nuestro país pisó ayer el Club de Chapultepec y de inmediato acaparó la atención de todos los presentes durante el día de práctica del WGC México Championship.
Era un reflejo de la época de la mexicana como la mejor jugadora dentro de la LPGA, durante su dominio en los campos del mundo.
La tapatía disfrutó de los elogios de los aficionados. Firma por aquí, foto por allá, autógrafo de este lado. La recién incorporada al Salón de la Fama del Golf no le dio tiempo de regalar todas las rúbricas que le solicitaron.
“Lorena es una estrella local e internacional”, subrayó el texano Jordan Spieth. “Está entre los inmortales y es una de las mejores en la historia. Para mí, fue un honor conocerla”.
El cuarto sembrado del PGA Tour señaló que probablemente hubiera perdido un torneo si se hubiera enfrentado a la tricolor.
“Me gustaría preguntarle cuál fue su proceso para obtener todo ese éxito”.
Han pasado ocho años desde que Ochoa se retiró del circuito femenino, pero el recuerdo de su gloria se mantiene en la mente de todos los aficionados del deporte. Con 27 títulos y 158 semanas en lo más alto de este deporte colocan a Lorena como una de las mayores referentes que tendrá el golf a nivel mundial.