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La Ciudad de México también fue sede de una etapa de la Tour de Francia 2017, y cumplió con su cometido, ya que los cientos de participantes se mostraron satisfechos con la organización, pero sobre todo, porque se promocionó de gran forma el ciclismo de carretera.
El domingo 10 de diciembre, los pedalistas tomaron sus aditamentos dispuestos a recorrer los 135 kilómetros, los más asiduos, y 75 km para todos aquellos que toman la bicicleta como recreación.
La etapa larga de este certamen, que hace alusión a la máxima carrera del mundo, llegó hasta el norte de la Ciudad de México y luego regresó al sur para terminar en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
“Vimos un buen recorrido, es momento de estar con los amigos y familiares en esta carrera de convivencia”, manifestó Armando López, ciclista que tomó parte por segunda vez en esta prueba.
Se pudo ver la asistencia de gente de trayectoria como el regiomontano Alberto Covarrubias, quien corre en Estados Unidos, o la seleccionada nacional Ana Teresa Casas.
Además, aquellos que dieron gloria al ciclismo de ruta en el país, como el legendario Miguel Arroyo, quien corrió en Italia y fue protagonista de la Vuelta de las Américas o Vuelta México.
“Qué bueno que haya eventos de este tipo para promocionar al ciclismo, que mucha falta hacen en México”, mencionó Arroyo.
También estuvo Eduardo Graciano, quien ha participado en rutas máster y en 2000 todavía representó a México.
El alemán Jens Voigt fungió como embajador de la competencia y sostuvo que la respuesta de la gente ha sido buena; eso habla de lo muy arraigado que está el ciclismo en este país.
Fue una carrera de promoción del ciclismo, que contó con más de 3 mil participantes, quienes disfrutaron de una fría mañana en la capital, que se calentó con el esfuerzo de las piernas y el aplomo del corazón.
La Etapa CDMX 2017 de la Tour de Francia fue parte del circuito mexicano, pero una muestra de que el ciclismo está vivo en una capital enamorada del deporte.
