En un intento por poner a punto el canal de nado contracorriente que la Conade compró en 2016, personal de mantenimiento ya trabaja para componer la instalación, un día después de que EL UNIVERSAL Deportes dio a conocer que está descompuesta.
Testimonios recabados por este medio revelaron que la alberca, marca SwimEx 600 T SERIES , se utilizó muy poco desde su instalación en 2016 porque la potencia de su corriente era tan débil que los nadadores no podían mantenerse en el centro braceando y pataleando para ser analizados en el mismo punto por sus entrenadores.
Al menos un equipo de cinco personas acudió este día al Centro Nacional de Alto Rendimiento para reparar el motor del canal que tuvo un sobrecosto de 4 millones 844 mil pesos .
Con este tipo de piscinas en buen funcionamiento, un entrenador podrá aumentar la velocidad de la corriente al ritmo de la carrera del nadador, además de observar de forma precisa cuándo y dónde se derrumba y corregirlo