Cleveland.— Los líderes de la Conferencia del Este se fueron de los Playoffs por barrida.
Los Cavaliers dominaron a su placer a los Raptors de Toronto en los cuatro juegos de las semifinales. Una paliza de128-93 les dio a LeBron James y compañía el cuarto pase, de manera consecutiva, a la antesala de las Finales de la NBA.
Es difícil hablar de Cleveland y no mencionar a The King James. La máxima figura en Cavaliers entregó otro espectáculo para los aficionados en el Quicken Loans Arena. Con 29 puntos, 11 asistencias y ocho rebotes, el tres veces campeón de la Liga llevó de la mano a sus compañeros a una nueva disputa por la corona del Este.
Ya son cuatro años de ver al mismo equipo en a final de la conferencia del Atlántico pelear por el título. Todas, desde el regreso de LeBron a Cleveland.
Los Cavaliers llegaron a las semifinales tras una pesada serie de siete juegos con los Pacers de Indiana, donde quedaron al borde de la eliminación y dieron una lección de superioridad ante unos Raptors que se hicieron pequeños.
Los jurásicos se asustaron con la bestia. Ni dieron espíritu de lucha en lo que fue su última aparición en esta campaña, que pintaba para histórica y terminó como un fracaso más en la larga lista de eliminaciones de la quinteta.
La impotencia consumió a Toronto, más a su figura, DeMar DeRozan, quien se fue expulsado antes de que terminara el tercer episodio, por un manotazo en la cara de Jordan Clarkson.
La acción del “10” de Raptors pudo ser una cuenta pendiente por el codazo del jugador de Cavaliers sobre Kyle Lowry, durante el tercer juego de la serie, que pasó de largo para los árbitros.
A Cleveland solamente le queda esperar el rival para la final del Este. Los Celtics lideran 3-1 la serie, pero apuntan para ser los que se enfrenten a Cleveland.
De que Boston se imponga sobre 76ers se repetiría la serie del año pasado, donde se impuso LeBron James en cinco duelos.
Por fin, los Cavaliers tendrán un respiro hasta que se defina su contrincante.