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La paliza de ayer ante los Celtics de Boston 133-77, golpeó el orgullo de los jugadores de los Bulls de Chicago , y en especial a los jóvenes, quienes acordaron no asistir a la práctica de hoy.
La derrota por 56 puntos de diferencia es la peor en la historia de los Bulls , superando el revés por 53 tantos, 127-74, en contra los Timberwolves el 8 de noviembre de 2001.
Los Celtics igualaron la mayor victoria a domicilio de la historia de la NBA. Comparten la marca con los Sonics de Seattle , que vencieron a los Rockets de Houston en 1986, por 136-80.
Según el Chicago Tribune, los jugadores de los Bulls intercambiaron mensajes de texto para ausentarse al entrenamiento por diferencias con el nuevo entrenador Jim Boylen. Sin embargo, los veteranos del equipo se interpusieron y lograron que todos se reunieran en las instalaciones del club.
Jim Boylen
, coach del equipo, resolvió el problema y utilizó la reunión como una oportunidad para generar confianza con los jugadores, reveló la misma fuente.
En un punto en la reunión entre el coach y jugadores, Boylen invitó a sus pupilos a ver películas y permitió que los jugadores entrenarar sus disparos en lugar de una práctica difícil. Hizo eso para mostrar a los jugadores cómo deben aprender a confiar en él.
A mitad de semana en teleconferencia en donde EL UNIVERSAL Deportes participó, Boylen señaló que el viaje de tres días a la Ciudad de México , sería de gran provecho para unir a la plantilla y para olvidar el mal momento por el que atraviesan (6-21).
"Definitivamente nos ayudará", aseguró Boylen. "Estaremos juntos tres días en la ciudad, y será una gran experiencia para nuestros jugadores".
El entrenador de 53 años de edad espera contar con tiempo para salir a conocer algún museo y escalar las pirámides. "Eso ayudará a que el equipo
crezca y se refresque. Será algo único", dijo.