Boston.— Los Celtics respiran más tranquilos. Consiguieron un resultado contundente (120-106) frente a los Bucks de Milwaukee, para tomar una ventaja de dos juegos.
Las recientes actuaciones de Boston dejaron bastante dudas para los Playoffs. La lesión de Kyrie Irving tenía en suspenso a los aficionados.
La actitud de anoche fue completamente distinta a la del último mes, cuando los Celtics pusieron en riesgo el segundo sitio de la Conferencia del Este. Regresaron a un nivel categórico, para viajar a Milwaukee con un colchón en la primera ronda.
Desde la baja definitiva de Irving, Jaylen Brown se vistió con la capa de héroe. Al principio le costó trabajo, pero poco a poco ha ganado confianza, que le ayudó a anotar 30 puntos y cinco rebotes en el TD Garden. A sus 21 años de edad, se convirtió en el jugador más joven en conseguir esa cifra en postemporada para Boston.
A Celtics y Bucks les toca hacer maletas y disputar el próximo duelo en Milwaukee, el viernes.
A los pupilos de Joe Prunty les tocará lo más difícil, a pesar de que jugarán en casa este fin de semana. La defensiva de Bucks ha pecado de dar muchas libertades. Incluso, en el primer juego, cuando forzó el tiempo extra, no aguantó el ritmo de sus rivales.
Giannis Antetokounmpo no puede hacer todo él solo. Sus 30 puntos, nueve rebotes y ocho asistencias son inútiles si sus compañeros no tienen la capacidad de frenar la estrategia de los Celtics.