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¿Qué más podía hacer un padre? Su hija tiene un sueño, el sueño es nadar, pero él, de natación no sabe nada. Él es un empresario, exitoso empresario que maneja varias estéticas, pero de nadar, nada.
Mas, ¿qué no haría un padre por una hija? Y el papá de Athena Meneses, la competidora más joven de la delegación Mexicana que irá a los Juegos Panamericanos de Lima, con 14 años ha hecho lo que puede, hasta dejar su profesión de empresario para volverse su entrenador de tiempo completo.
"Mi papá ha dejado todo por mí, por mi sueño. Él no sabe nada de natación, pero me ha apoyado al 100 por ciento, se la pasa todo el tiempo comprando libros, platicando con instructores, viendo tutoriales en Youtube".
Así, Meneses Kovacks no sólo logró clasificar para los Panamericanos al dar los tiempos en las Olimpiada Nacional compitiendo por el Estado de México además del Grand Prix de Tijuana, además logró su boleto a los Juegos Olímpicos de Tokio.
Y todo con un entrenador, que de natación, no sabe, o sabía, nada.
La historia es corta pero profunda: "Entrenaba en un club uy cercano a mi escuela (secundaria), mi entrenador era un búlgaro que de buenas a primeras se fue a su país, por cuestiones personales, y me quedé sola".
El sueño no iba a morir ahí, llena de ilusión pidió entrenar con alguien más, pero todos los que llegaban no llenaban sus expectativas, y no se dedicaban a ella de tiempo completo.
Su papá sí: "Él se quedaba a algunos de mis entrenamientos. Se fijaba en los ejercicios, en las rutinas y nada más. Eso sí, iba a las competencias, pero nada más".
No mucho más.
Llegó el momento de decidir, o seguir compitiendo o abandonarlo, porque no había quién se hiciera cargo, y ahí el señor Andrés Meneses entró al quite, "hubo un tiempo en el que estuve sin entrenador, nadie lo podía hacer y decidió hacerse cargo, era eso o dejar de practicar el deporte, comenzó a hacerlo y lo tomó muy en cero. Comenzó a estudiar, a comprar cada libro que podía, ver tutoriales en Youtube, y de ahí para adelante. Todos los días planea mis rutinas, se la pasa estudiando para saber cómo mejorar mi técnica. Se duerme a las tres de la mañana y se levanta temprano conmigo.. Todo su tiempo me lo dedica a mí".
Es empresario, "tiene varias estéticas, las cuales ha sacrificado en ir a checar por estar conmigo. Ha dado todo por mí y espero que algún día pueda retribuirlo".
Pero el tener a tu familia también en la alberca, parecería que agrandaría la presión sobre la competidora y Athena lo reconoce, porque quiere quedar bien con todos: "Sé que mi familia mi papá, estará conmigo en las buenas y en las malas. Cuando ganamos, dice, ganamos todos, cuando pierdo, igual, perdemos todos. Sí, hay una extra siempre, porque trato de hacerlos sentir orgullosos de mí, a todos en mi casa. Quiero que sepan que traté de hacer lo mejor aunque no haya ganado. Sí, causa mucho estrés tratar de enorgullecer a alguien que amas es la mayor presión que puede existir, pero trataré de hacerlo por mí, mis papá y claro, por México".
Athena competirá en los Panamericanos en 200 dorsos. 100 dorso y 100 mariposa. y espera dar una sorpresa, y por lo menos dejar el nombre de México en todo lo alto. "Me va a ayudar mucho la competencia en lo que se refiere a la experiencia, en aprender de muchos nadadores. La verdad es que estoy muy emocionada de competir con tan buenos atletas y espero ganarles".
Es la competidora más pequeña de la Delegación Mexicana, y eso "también me hace sentir muy orgullosa, no sólo de mí misma, también de mis papás, de toda mi familia que me ha apoyado incondicionalmente. Mucha gente creyó que por mi edad no iba a llegar, muchos hablaban de que las competencias de clasificación iban a ser mi última oportunidad y no tuvieron razón. Hoy comienzo un largo camino en el que llegaré muy lejos, lo sé".
Pase lo que pase, Athena Meneses Kovacks, ya se siente ganadora, y ya tiene un lugar en su casa "para poner la medalla, ahí en una pared en el comedor, ahí va a estar" y su padre la verá orgulloso pero con sueño, un sueño hermoso que le debe a su cuerpo cuando a las tres de la mañana planea los entrenamientos de su hija, porque el de natación, nada de nada.