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ariel.velazquez@eluniversal.com.mx
Barranquilla.— En 1990, poco más de la mitad de la actual selección mexicana de basquetbol no había nacido. En ese año, se celebraron los Juegos Centroamericanos y del Caribe de la Ciudad de México, en los que la quinteta tricolor consiguió su más reciente medalla de oro y la séptima en su historia, que la ubica como la más ganadora en el deporte ráfaga en esta justa.
De aquellos logros ni el recuerdo queda para los 12 Guerreros.
“No sabía eso [título de 1990], nosotros venimos a escribir nuestra propia historia. Tenemos varios rostros nuevos en el equipo, pero comprometidos con el basquetbol mexicano para tratar de conseguir los logros que se merecen”, declaró Gustavo Ayón, capitán del equipo.
Con 33 años de edad, Ayón es el jugador más veterano de la selección. Regresa a un torneo oficial (sin contar eliminatorias mundialistas), por primera vez desde 2015, cuando conformó el combinado del Preolímpico rumbo a Río de Janeiro.
El elemento del Real Madrid se dedicó durante casi tres años a su carrera en Europa. Su regreso coincidió con el adiós del entrenador Sergio Valdeolmillos y la llegada de Iván Déniz.
“Vengo a dar otros pasos en la selección, ahora con los jóvenes, con quienes espero realizar un buen trabajo. El cambio se tiene que hacer, creo que hay jugadores muy importantes que van a lograr la transformación en un par de años. Me devolvieron las ganas de jugar para México, dando pasos hacia adelante para el basquetbol mexicano”, afirmó.
“Estamos trabajando con un grupo de jóvenes que creemos serán el futuro del seleccionado. Debemos aprovechar las oportunidades de torneos continentales o internacionales para incrementar el nivel”, señaló el entrenador.
En su etapa al frente de los 12 Guerreros, Iván Déniz tratará de imponer una política de puertas abiertas a los jóvenes, ya que entiende que la madurez de la que gozan Gustavo Ayón, Jorge Gutiérrez y Francisco Cruz, se acerca a su caducidad.
“No podemos depender toda la vida de los veteranos. Está claro que en estos momentos Gustavo Ayón y Jorge Gutiérrez son de lo mejor que tiene el país, al ser referentes a nivel mundial. A nosotros nos toca lograr que los nuevos jugadores alcancen roces internacionales, que se aclimaten a este tipo de eventos para que en escenarios más grandes no les llegue todo de sorpresa”.
En su primera convocatoria al frente de México, Iván Déniz tuvo en su plantilla a Diego Willis, juvenil de 19 años e hijo de Rafael Willis, quien en 1990 consiguió el más reciente oro para México.
“Diego estaba contemplado para los Juegos Centroamericanos, pero tuvo que reportar con su universidad en Estados Unidos. Tenemos mucha confianza en lo que pueda hacer y desarrollar en aquel país”, consideró el estratega ibérico.
México enfrentará hoy a las 15:00 horas a Bahamas. Mañana se medirá con República Dominicana y cierra el martes la fase de grupos contra Cuba. Los 12 Guerreros se quieren contagiar del éxito de México en Barranquilla 2018.