Orchard Park, Estados Unidos.— Josh Allen y los Bills de Buffalo abrieron la temporada con aspiraciones de llegar al Super Bowl.
Tras la primera ronda de los Playoffs, su objetivo sigue a la vista, pero ya no tan legible.
Allen no se intimidó por un partido con tres pérdidas de balón, y el tres veces campeón defensor en la División Este de la Conferencia Americana, Buffalo, evitó un gran colapso al recuperarse para lograr una victoria sobre los Dolphins de Miami (34-31), séptimos sembrados en la AFC, pero bastante agotados por las lesiones.
Al reconocer que no estuvo en su mejor momento, el quarterback de los Bills dijo que lo único que importaba era ganar.
“Estamos en la época en la que la temporada se reduce a un partido”, dijo. “Todo lo que importa es sobrevivir y avanzar. No importa cómo ganemos”.
La balanza se inclinó hacia ellos hasta los minutos finales de un juego en el que los Bills desperdiciaron una ventaja de 17-0 contra un oponente que llegó cojeando a los Playoffs, al perder cinco de sus últimos seis partidos y valerse de su tercer pasador, el novato Skylar Thompson.
No fue hasta que el balón suelto de Allen fue devuelto a touchdown por el defensivo Zach Sieler, para poner a los Dolphins arriba 24-20, que la ofensiva de los Bills volvió a despertar.
Entonces, Josh lanzó dos pases de TD en un lapso de 3:11 minutos y definió todo.