Si nada raro sucede, el ranking de EL UNIVERSAL Deportes no cambiará de dueño en lo que resta de la fase regular.
No hay alguien que le compita, en este momento. El gran reto para Fernando Ortiz y sus futbolistas es mantener este nivel un mes y medio más.
Sufrió para derrotar a La Máquina, pero consiguió el triunfo. Se las ha ingeniado para mantenerse en la parte alta y es un equipo con muchos recursos.
La capacidad de reacción mostrada fue lo más valioso en su visita al estadio Cuauhtémoc. Lo que debe preocuparle fueron las falencias defensivas expuestas.
Consiguieron una buena victoria, pero les falta consistencia para llegar a la parte alta de la clasificación. Ha vuelto a mostrar cierta fragilidad en la zaga.
Entre los punteros, es el que tiene menos reflectores, pero eso parece agradar a los Guerreros, que lucharán por un boleto directo y en casa han vuelto a hacerse muy fuertes.
Más allá de que el arbitraje ahora le echó una mano, el Rebaño Sagrado luce en ritmo. Incluso, se dio el lujo de reservar a gente como Alexis Vega… Y ganó.
Es un hecho que el conjunto se le ha caído a Ignacio Ambriz, por lo que la presión empieza a ser importante. Le urge reaccionar.
Visitó una de las canchas más complicadas en toda la Liga MX y compitió durante algunos minutos. Es un equipo con más puntos de lo que hacía pronosticar su plantel.
Lo de La Franja ya es ridículo. Volvió a dejar ir un triunfo que parecía seguro. Otra vez jugó bien casi todo el encuentro, pero no ganó.
Poco a poco, el equipo se le ha caído a Ricardo Valiño, y no se ve cómo pueda detener el tobogán. Eso sí, fue perjudicado por el arbitraje.
La solidez de su zaga cada vez es mayor y eso, obviamente, se traduce en puntos. Volver a meterse en el repechaje parece viable.
Lo más importante para ellos es que no recibieron gol y ganaron. Aunque su futbol todavía no convence, La Fiera parece encaminarse a la reclasificación.
Mostraron parte de la lucidez que su afición espera, aunque no se puede ignorar que fue ante el peor equipo del torneo. El sábado será una prueba más seria.
El buen inicio que tuvo ya se olvidó por la importante baja de juego experimentada por un plantel que no tiene malos jugadores.
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Le compitió al líder… Hasta que recibió el primer gol. Es un equipo con talento, pero poca fuerza anímica. Si se va abajo en el marcador, sufre mucho para volver.
La temporada está prácticamente perdida, y no en lo numérico, sino por la actitud mostrada durante buena parte del juego en el estadio BBVA.
El bicampeón parece haberse despedido de toda opción. Las matemáticas aún le presentan algunas; su futbol, no.
Por más que se esfuerzan, está claro que no hay conjunto peor que los Gallos Blancos. Sólo les alcanza para pelear por momentos.