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Así como Ricardo Ferretti es muy expresivo cuando se enoja, es igual cuando lo rodea la tristeza.
Al Tuca se le fue el título internacional, el de la Liga de Campeones de la Concacaf , ese que le falta para cerrar su basta colección de laureles que guarda en su casa. El Monterrey lo venció en el global 2-1 en el estadio BBVA Bancomer.
“En lo personal, estoy triste, al igual que todo el equipo. Nos preparamos para llegar a esta instancia y no lo logramos [ganar]. Estos logros hay que buscarlos constantemente”, comentó el brasileño.
El Tuca
no quiso revelar su decisión de guardar a André-Pierre Gignac y a Javier Aquino durante los primeros 45 minutos de la final. El francés modificó toda la ofensiva felina y, con un gol de tijera, acercó a los universitarios en el global, pero no alcanzó.
“Para esas decisiones, estoy yo. Si las cosas resultan, soy un genio; si no, un burro. Así de sencillo”, sentenció.
No queda más que “darle la vuelta a la página y pelear por el título del Clausura 2019.
