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Miguel Herrera sonríe más que nunca en este torneo. Ganó su segundo clásico del Apertura 2017 y de paso consiguió su primera victoria en el estadio Azul como técnico americanista.
“Me voy feliz, se nos dieron las cosas como las trabajamos. No puedes pensar que el rival no cuenta. Fue un excelente adversario”, declaró el Piojo al finalizar el Clásico Joven.
El timonel americanista fue irónico al preguntarle sobre el 101 aniversario azulcrema: “Se molestan y se burlan de nuestro pastel, pero el triunfo estuvo padre ¿no?”, dijo entre risas el técnico americanista.
Ganar este duelo —el primero de tres de alta exigencia que tendrá en cuestión de dos semanas—, le da tranquilidad para preparar los próximos compromisos de las Águilas.
“Los muchachos respondieron, me quedo muy tranquilo y espero que así sigan. Lo mejor fue que Uribe cerrara con broche de oro el resultado”, aseveró.
Con relación al destacado nivel del colombiano Darwin Quintero, aseguró que todo lo que el hizo fue darle la confianza, pero destacó que el mérito es únicamente del sudamericano. A pesar del triundo, los jugadores americanistas se fueron en silencio.