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edgar.luna@eluniversal.com.mx
Segundo lugar de la tabla general, mostrando un futbol vertiginoso, claro y contando en sus filas al actual líder de goleo Djaniny Tavares…
Es Robert Dante Siboldi, el técnico revelación del torneo.
Siboldi, portero cuando jugador, llegó a México en 1981 para el Atlas, y de ahí para el real; 37 años en suelo nacional “y diez ya naturalizado”, dice, “soy un técnico mexicano, que se ha hecho a base de picar piedra”.
Cuando se retiró en 2002, en los Gavilanes de Nuevo Laredo de Primera A, tenía una cosa bien en claro, “siempre quise ser técnico, y luché por llegar… Me ha costado trabajo, pero me siento capaz”, confiesa en entrevista con EL UNIVERSAL Deportes.
Nueve torneos dirigiendo en el Ascenso le hicieron descubrir los secretos del vestidor, después le llegó una probadita, siendo interino en Cruz Azul, se fue a Santos a manejar las fuerzas básicas y de rebote, como buen portero, agarró la oportunidad de dirigir al primer equipo el torneo pasado, con la salida de José Manuel de la Torre.
“Las cosas pasan por algo. En Cruz Azul me formé y gané experiencia, si no se pudo continuar en el primer equipo por algo fue… quizá no estaba listo. Ahora llegó algo que no esperaba. La idea era dirigir en la Liga MX, pero no así, estaba en fuerzas básicas desde hace tres años y medio y llegó. Ahora hay que aprovechar, la ventaja es que conozco las entrañas del equipo, lo que ha invertido y bueno… Ahora estoy preparado”.
No es el popular América, tampoco los multipublicitados Pumas, ni el poderoso Monterrey… Santos ahí va, a la callada, como segundo lugar general… “el secreto es que no hay secreto. Para eso cuento con el apoyo de la directiva, que te da todo y la entrega de los muchachos es enorme, tienen hambre, todos quieren y queremos borrar la mala temporada pasada”.
Y se dice mexicano… “bueno, mexicano-uruguayo, aunque soy más de aquí que de allá. Todo lo que tengo es por México, este país me adoptó y yo lo pago trabajando honestamente”.
Desde los 80 hasta los 2000, Siboldi ha visto crecer al futbol nacional, “aunque crean que son frases hechas, lo digo en verdad, aquí hay competitividad, cualquiera le gana a cualquiera y no por ser mediocre, sino porque hay capacidad de técnicos y jugadores. No es un torneo de dos equipos, donde los demás sólo son comparsa, se compite y bien”.