El alemán Sebastian Vettel y el monegasco Charles Leclerc p resentaron este martes en sociedad el Ferrari SF1000, e l monoplaza con el que competirán en el Mundial del Fórmula Uno de 2020, en una ceremonia celebrada en el Teatro Romolo Valli de Reggio Emilia, ciudad donde vio la luz por vez primera 'il tricolore' (la bandera nacional italiana) y a unos 30 kilómetros de su sede en Maranello.
El nuevo coche hizo su aparición después de una espectacular introducción, con una orquesta, coro y bailarines de ballet, así como los discursos del director general de Ferrari, Louis Camilleri, y el director de la escudería, Mattia Binotto, frente a un video de la historia de la F1 de Ferrari.
El SF1000, llamado así para celebrar la temporada en el que Ferrari competirá en su gran premio número 1.000 (en Canadá a mediados de junio), es una evolución del SF90 del año pasado, el coche que terminó segundo, por detrás de Mercedes, en la clasificación de constructores.
En 2020 la reglamentación técnica se mantiene en gran medida estable, antes de la gran revolución programada para 2021.
"Este es el monoplaza número 66 construido por la Scuderia Ferrari" , dijo Binotto. "El grupo (técnico) es todavía joven y todavía tenemos que crecer. Tenemos que aprender de nuestros errores. Tenemos que capitalizar esto y concentrarnos en la fiabilidad, que fue uno de los puntos débiles de la temporada pasada", agregó.
"Al mismo tiempo tenemos el proyecto 2021 que es el mayor cambio que se ha producido en la F1 desde el principio. Tenemos que estar preparados para esto", señaló.
Camilleri no dudó en afirmar que su equipo tiene "talento y determinación para transformar en realidad sus ambiciones".
A su vez, John Elkann, presidente de FIAT Chrysler y cuya familia (Agnelli) controla Ferrari, pusó en enfásis tanto el lugar de presentación como las ambiciones de su escudería. "Es la primera vez que nos presentamos fuera de Maranello (sede de la fábrica) y estamos orgullosos de hacerlo en este lugar tan simbólico para nuestro país, Italia, al cual estamos orgullosos de representar en todo el mundo", comentó.
Y es que Reggio Emilia es denominada la 'cittá del Tricolore', pues fue en ella donde en enero de 1797, nació la bandera italiana.
"En esta temporada disputaremos nuestro 1000 Gran Premio, y el hambre de triunfos siempre está al máximo. Sabemos la gran competencia, pero ello es un desafió para que demos siempre el máximo", añadió Elkann.
En la ceremonia, asimismo, participó desde el escenario como copresentador el español Marc Gené, piloto de pruebas de Ferrari. Uniéndose después, entre otros, los dos pilotos oficiales: el alemán Sebastian Vettel y el monegasco Charles Leclerc.
Vettel y Leclerc tienen como principal misión lograr para Ferrari un campeonato de constructores que no alcanza desde 2008, y hacerse con el de pilotos, que la casa italiana no logra desde que el finlandés Kimi Raikkonen ganó en 2007.
El SF1000 dará sus primeras vueltas dentro de una semana, cuando comiencen las pruebas de pretemporada en el Circuito de Barcelona-Catalunya el 19 de febrero.
De momento, la SF1000 se ha presentado en sociedad, con un acto elegante, en la que sigue el estilo de la firma de unir arte y motor, y concluido 'a la italiana': todos los participantes en el escenario con una bandera italiana y una pancarta con el escrito #essere Ferrari.