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Diputados federales de las diversas fracciones parlamentarias alistan una serie de iniciativas para reformar la Ley General de Cultura Física y Deporte , a fin de evitar riñas como la que ocurrió este fin de semana en el estadio La Corregidora , en Querétaro. Entre las principales propuestas, destaca la extinción de las denominadas barras bravas.
Para Jorge Álvarez Máynez, coordinador de la bancada de Movimiento Ciudadano en San Lázaro , la legislación actual integra una visión punitivista, al establecer penas de seis meses a cinco años de prisión y de cinco a 90 días multa a quienes lancen objetos, ingresen sin autorización a los terrenos de juego y participen activamente en riñas.
Por ese motivo, presentarán una propuesta que tenga “un enfoque más preventivo”.
“No vas a arreglar el problema amenazando con años de prisión a las personas, lo que nosotros estamos planteando es replicar lo que se ha hecho en otros países y que es muy evidente que les funciona: la credencialización y una base de datos de los aficionados que van a los estadios, que se privilegien las membresías en la compra de boletos”, expuso.
La iniciativa también prevé la prohibición de las barras, “que son caldo de cultivo para la violencia y además son financiadas por los propios equipos”.
Incluir la limitante para la venta de alcohol, y que en cada partido haya elementos de la Guardia Nacional, “aunque sean pocos, para que ellos mimos puedan establecer una línea de comunicación directa con sus compañeros y solicitar presencia en caso de que se requiera”.
El grupo parlamentario del Partido Acción Nacional también analiza la extinción de barras, dijo el diputado albiazul Fernando Macías, quien es integrante de la Comisión de Seguridad.
Desde la bancada del PRI , la diputada Cynthia López detalló que está por la regulación de las barras, principalmente para evitar filtraciones de la delincuencia: “Ya hay investigaciones sobre una posible intervención del crimen organizado; entonces, es un problema profundo”.
Por su parte, la vicecoordinadora de Morena en San Lázaro , Aleida Alavez, consideró que antes de buscar desaparecer las barras, se debe buscar el diálogo.
“Si hay un desentimiento en la regulación del manejo de las barras, pues sí, que se prohíban, pero primero creo que hay que agotar el diálogo con los dueños de los clubes para aclarar qué tanto podemos entrar, como poder legislativo, a una legislación más extrema y más rigurosa”, expuso.
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