La página de Facebook de Greganthi B.E.A. tiene 118 amigos. No tiene información de biografía, ni teléfono de contacto. Ofrece ofertas de empleos en restaurantes en zonas de la Ciudad de México como Coyoacán y Santa Fe y la única pista de a qué se dedica es una palabra que se encuentra entre paréntesis en su biografía: Done CG
Sin embargo, Gregathi B.E.A. funge como la patrona de varios jugadores de Liga de Futbol Americano Profesional (LFA) ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) , en la página en la que se pueden revisar las semanas cotizadas de los trabajadores, de acuerdo al menos a media decena de jugadores y que EL UNIVERSAL Deportes pudo comprobar.
“Nunca la había escuchado en mi vida”, dice uno de los jugadores, quien prefiere guardar su anonimato por temor a represalias y que, en el IMSS , esta empresa funge como su patrón. “El único contrato que firme este año fue con la LFA”.
Greganthi B.E.A. según el IMSS
, está establecida en Puebla, el mismo estado en el que tiene su domicilio Done CG, la compañía que aparece nombrada entre paréntesis en la página de Facebook y que se describe en su sitio de internet como “una firma mexicana especializada en proveer soluciones de recursos humanos a nivel nacional, ajustadas al giro y al tamaño de la empresa”.
Este diario habló a las oficinas de Done CG, pero negaron cualquier relación con Greganthi B.E.A. "No recuerdo que el corporativo tenga relación con una liga de fútbol americano" , dijo una recepcionista que no se identificó.
Otro jugador, que también prefiere guardar su anonimato, muestra el contrato que firmó con la LFA a este diario. En éste se muestra como patrón a “LFA Profesional S.A.P.I. de CV”. En ningún momento del convenio aparece Greganthi B.E.A, Done CG o cualquier otra compañía. En contraparte, en la página de cotizaciones del IMSS, la LFA no aparece como su figura patronal.
Noemí Monroy, abogada laboral por la UNAM y Miembro de la Asociación de Abogados del Deporte de la CDMX y Área Metropolitana, sostiene que la LFA está obligada por ley a ser la figura patronal de los jugadores.
“Es grave lo que hace la LFA en cualquier caso, ya sea que no haya dado de alta a los jugadores en la página de cotizaciones del IMSS o que haya subcontratado a otra empresa para que lo hiciera. En este último caso, también es grave que esta compañía (Greganthi B.E.A.) los haya dado de alta más de allá de los cinco días que estipula la ley”.
Este diario tiene una copia de las páginas de las cotizaciones de varios jugadores. Greganthi B.E.A. los dio de alta el 9 de abril. Sin embargo, el primer juego de temporada regular se disputó el 22 de febrero.
"Firmamos el contrato unos días antes de que jugáramos el primer partido"
, dice otro jugador, que también prefiere mantener el anonimato.
Este diario buscó a Óscar Pérez, dueño y presidente de la LFA. No aceptó ni negó la relación de la Liga con Greganthi B.E.A y dijo que “no podía emitir una postura, porque no llevaba la parte administrativa de la Liga. Prefiero no hablar y no terminar malinformando”
Añadió que es esa parte la lleva el comisionado de la Liga, Alejandro Jaimes. Sin embargo, no hay nadie más arriba en el organigrama de la liga que el mismo Pérez.
Pero, ¿por qué la LFA recurriría a otra empresa para dar de alta a sus jugadores? Monroy sospecha que, al menos, podría ser un caso de simulación fiscal.
"Ellos (la LFA) podrían utilizar a un tercero (Greganthi B.E.A.) para al menos estar simulando fiscalmente en un caso menor. En un caso mayor podrían estar evadiendo al SAT y al mismo IMSS", alerta Monroy.
Si fuese el caso que la LFA haya incurrido en subcontratar a los jugadores, la Ley Federal del Trabajo lo considera ilegal. En su artículo 15 D menciona que no se permitirá el régimen de subcontratación cuando se transfieran de manera deliberada trabajadores de la contratante a la subcontratista con el fin de disminuir derechos laborales.
“Los únicos que puedes cambiar esto son los mismos jugadores. Para que esto cambie deben de acudir al IMSS a hacer la corrección y para que el mismo Instituto se dé cuenta de lo que está pasando. Al final, los perjudicados son los mismos jugadores , porque no generan la antigüedad correspondiente, mientras que en caso de sufrir lesiones graves podrían estar en la indefensión”, sostiene Monroy.