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Si no fuera por Luis Ángel Malagón, el Puebla hubiera humillado al Necaxa.
La actuación del portero mexicano dejó los cartones con un muy maquillado 1-0 a favor de La Franja, que mantuvo su ascenso bajo la dirección técnica de Nicolás Larcamón.
Los poblanos remataron 10 veces al arco hidrocálido, de los cuales nueve fueron atajados por Malagón, quien sigue firme para defender el arco de la Selección Mexicana en Tokio, a pesar de las tentaciones de Guillermo Ochoa. Solo Emanuel Gularte fue capaz de meterle gol.
El meta salvó al Necaxa de todo tipo de disparo por parte de los locales. Por arriba, a media altura y abajo, el seleccionado nacional para el Preolímpico evitó lo que pudo ser una goleada en contra del arco hidrocálido.
Pero el mexicano no pudo ante las constantes llegadas de los camoteros, quienes rodearon el área rojiblanca hasta que la quebraron, hasta el segundo tiempo. En una jugada de tiro esquina, La Franja movió por todos lados el esférico, entre rebotes, Gularte —de taquito— lo desvió al fondo de las redes de Malagón, agotado sobre el pasto del Cuauhtémoc.
Con el gol a favor, el Puebla retiró sus tropas y aguantó a su rival, necesitado del empate, debido a que no quería seguir con una racha de cinco partidos sin ganar para los pupilos de José Guadalupe Cruz.
Sin embargo, el sistema hidrocálido no funcionó en ningún lado, por diversos errores en precisión, sobre todo en el ataque. En cada pérdida de balón por parte del Necaxa, La Franja recuperó rápido, tocó fácil y remató hacia el arco de Malagón, quien no se dio por vencido a pesar de que sus compañeros lo dejaron abandonado durante el partido.
La victoria impulsó al Puebla entre los mejores seis de la tabla de clasificación —a la espera del resultado del Querétaro—, cerca de los punteros del Guardianes 2021
