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La nueva normalidad
en el futbol llegó a Inglaterra, durante el partido amistoso entre el Chelsea y Brighton.
Alrededor de 2 mil 500 aficionados se presentaron al cotejo, respetando el distanciamiento social pero sin barreras físicas en los rostros.
El gobierno británico aceptó que este duelo sirviera como una prueba piloto, para conocer cómo se podría organizar una vuelta controlada de los aficionados a los campos de la Premier League, que arranca su temporada 2020-21 el 12 de septiembre.
Para ingresar al estadio Falmer, ubicado en Brighton, al sur de Inglaterra, fue obligatorio tomarse la temperatura y el uso de cubrebocas, pero, ya en los asientos, los presentes se removieron las mascarillas.
El departamento de Cultura, Medios y Deporte en la isla realizará más pruebas como las de hoy, con la intención de reabrir los eventos deportivos a los aficionados en octubre.
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