Seis meses después de ingresar a la clínica Hacienda Nueva Vida , para rehabilitarse de sus problemas de adicciones, el exboxeador mexicano, Miguel Ángel González fue dado de alta y recibido por su familia, para encarar el reto de volver a la vida normal.
"Me he puesto de pie nuevamente, levantado de la lona, porque quiero morirme de pie como los árboles. Es un gusto muy grande estar aquí, haber estado en esta clínica donde me he recuperado y me he sentido muy bien. Donde he aprendido a compartir con los internos, a socializar con ellos y estamos muy contentos. Agradeciendo a mis padres, a mis hermanos y a mis hijas por el apoyo y el cariño.
Tengo muchas ganas de vivir y ganas de compartir con los jóvenes, hacerles saber que sí se puede", compartió el exmonarca mundial del CMB.
"He aprendido mucho de todos los compañeros y por lo cual me siento muy contento. Sorprendido por el golpe bajo que me conectó el alcoholismo, necesitaba ayuda y ahora me siento fortalecido y recuperando conciencia, esperando que todo esto le sirva de experiencia a mis hijas, a todos los jóvenes para sus vidas futuras, porque el demonio del alcohol no respeta, que una vida libre de alcohol y drogas se vive mejor", agrego ' El Mago '.
Y lanzó un compromiso. "Tengo ahora una gran responsabilidad como deportista, como figura pública, eso me compromete a vivir de aquí en adelante una vida sobria y feliz".
Tan motivado está González , que ya espera el momento de subir al ring para ofrecer una pelea de exhibición, contra un rival con el que tiene una cuenta pendiente. "Me gustaría dejar en claro ese empate con Julio César Chávez, con todo respeto", sentenció el 'Tokyo Santa'.
Aarón Silva, Director de Hacienda Nueva Vida,
destacó que como toda rehabilitación al inicio fue difícil, "se sentía secuestrado, al verse visualizado en su realidad, pero con el tiempo se dejó llevar. Una persona, que a pesar de su problema siempre fue muy respetuoso, nunca dijo una mala palabra, se enojaba, pero no pasaba de ahí. Nosotros hasta aquí llegamos, ahora depende de él".
Al respecto, Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo , destacó el proceso por el que ha pasado el exmonarca mundial. "Venimos a celebrar la vida, en un lugar al que se llega con mucha incertidumbre y dolor, sin entender qué está pasando, pero cuando se alcanza un final feliz como el de Miguel Ángel González, es un motivo de gran satisfacción. Es algo que ha conseguido con mucho coraje y motivación".
Cinco años de trabajo suma Hacienda Nueva Vida , espacio en el que el deporte ha sido vital para recuperar a muchos boxeadores y exboxeadores que enfrentan algún tipo de adicciones.