El Eintracht de Fránkfutt volverá a pelear un año después por el título de campeón de la Copa alemana , tras sellar este miércoles su pase a la gran final, en la que se medirá con el Bayern de Múnich , al imponerse este miércoles por 0-1 al Schalke.
Un gol del delantero serbio Luka Jovic , que firmó a los 75 minutos el definitivo 0-1 al rematar a las redes de espuela un saque de esquina, permitió a los de Niko Kovac volver a una final, en la que el pasado año cayeron por 2-1 ante el Borussia Dortmund .
Pero si decisivo fue el atacante serbio, el auténtico héroe del conjunto visitante fue el portero finlandés Lukas Hradecky , que con sus intervenciones permitió al Eintracht llegar con opciones al tramo final del encuentro.
Y es que si Hradecky ya se lució a los 32 minutos en un remate de cabeza del austríaco Guido Burgstaller que parecía destinado al gol, en la segunda mitad, el portero finés salvó a su equipo con dos auténticos milagros.
Hradecky exhibió a los 67 minutos unos prodigiosos reflejos al desviar un remate a bocajarro de Burgstaller, tras una jugada de Daniel Caligiuri, que tras sortear a cuanto rival le salió al paso cedió el balón al atacante austríaco.
Una soberbia intervención que Lukas Hradecky repitió apenas unos segundos más tarde a no menos peligroso disparo del ucraniano Evgen Konoplyanka desde el interior del área.
Paradas que catapultaron a un Eintracht de Fránkfurt, que siete minutos después, no desaprovechó un saque de esquina para adelantarse en el tanteador (0-1) con un espectacular remate de espuela del serbio Luka Jovic.
Pero ni con el marcador a favor acabó el sufrimiento para los de Niko Kovac, que a falta de diez minutos para la conclusión se quedó con un jugador menos por la expulsión del suizo Gelson Fernandes, que vio la tarjeta roja directa en su primera acción en el partido, tras revisar el colegiado el vídeo.
Una circunstancia que permitió al Schalke encerrar en los siguientes minutos al Eintracht en su propia área, aunque sin llegar a lograr el ansiado gol de empate.
Y eso que el conjunto local llegó a marcar en el tiempo de prolongación, pero el arbitro decidió anular el tanto de Franco Di Santo, al entender que el delantero argentino se había ayudado con la mano al controlar el balón.
Una decisión que refrendó el triunfo del Eintracht, en el que este miércoles regresó al once titular el español Omar Mascarell, tras varias semanas ausente por lesión, que volverá a una final, en la que el técnico Niko Kovac se medirá con el que será su equipo la próxima campaña, el todopoderoso Bayern de Múnich.