Tras obtener su octavo título en el futbol mexicano, la ciudad de León, Guanajuato, se olvidó de la pandemia, de los más de 22 mil casos positivos a Covid-19 en la entidad y salió a las calles a festejar el campeonato.
Entre cantos, bailes, y fuegos artificiales, los seguidores del León cambiaron los cubrebocas o mascarillas por banderas y tambores.
A pesar de la insistencia por parte de las autoridades municipales y estatales para qué la gente no saliera a festejar en caso de que llegara el título, cientos de aficionados ignoraron la emergencia sanitaria para celebrar el campeonato del cuadro esmeralda.
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Tras el silbatazo final , los aficionados se concentran en la salida de autobuses del Estadio León esperando ver a su equipo salir con la Copa.
Tal vez no como ellos quisieran, pero las calles que rodean al estadio León tuvieron aficionados durante la final de vuelta del Guardianes 2020.
Frente a la entrada principal del inmueble, tres pantallas de un restaurante fueron el escenario perfecto para juntar a alrededor de 200 aficionados del León que desde la calle observaban la final de vuelta frente a los Pumas.
Sin sana distancia, pero con policías que pasaban vigilando si todos traían cuencas, los aficionados celebraron cada llegada del cuadro esmeralda, las atajadas de Rodolfo Cota y los goles de Emanuel Gigliotti y Jairo Moreno que le dieron el octavo título de su historia a la Fiera.
Con banderas de 120 pesos, gorros de 100, cubrebocas de 20 y coronas de 15, la gente empezó buscar la forma de sentirse cerca de su equipo.
Sin importar la pandemia , ni los más de 22 mil casos positivos de Covid-19 en León, Guanajuato, comenzaron los festejos por el campeonato del León en fútbol mexicano.