Los equipos que aspiran a ser grandes, los poderosos norteños, chocan en su juego más importante del semestre. Su clásico .
Y llegan en iguales circunstancias, porque aunque no están arrastrando la cobija, sí están debajo de las expectativas que pide su estirpe. Ya deben dar resultados.
En Rayados , la realidad es que ha sido un torneo regular de Javier Aguirre. El equipo se encuentra en el séptimo lugar de la competencia, con 11 puntos, apenas acaba de perder el invicto, pero esto es poco para un conjunto que invirtió cerca de 20 millones de dólares en refuerzos, y que está obligado a ser un cuadro que dé espectáculo. Pedro Esquivel, vicepresidente del Monterrey, afirma que lo que le viene al equipo “no nos asusta, nos ocupa. Estamos listos para afrontarlo”. El directivo sabe que las criticas al club, al cuerpo técnico, han sido duras, “pero esto no es algo nuevo, la gente en Monterrey es muy exigente porque siempre le hemos tirado a lo alto, así que —más que asustarnos— nos compromete en el proyecto”.
En Tigres, Miguel Herrera ha sufrido bastante este semestre, ya que nunca ha podido tener a su equipo completo. Las lesiones por las que tanto sufría en el América lo han acompañado a Monterrey, comenzando con su estrella, André-Pierre Gignac, y continuando con su líder, Guido Pizarro, aunado a la falta de ritmo de su nueva contratación, Florian Thauvin.
Dos victorias ante rivales a modo ( Querétaro y Mazatlán FC ) parecía que enrachaban al equipo, pero dos empates apurados (Atlas y León) hacen pensar que los felinos no están en su mejor momento, pero así competirán en el clásico regio ante su archirrival, la noche del domingo.
“Estamos recuperando gente, ahora hay que recuperar un poco de orden para afrontar el clásico. No debemos dejar que nos pogan abajo en el marcador, para reaccionar”, dijo el Piojo, de cara al juego de juegos en la capital de Nuevo León.
Los dos equipos más caros del futbol mexicano (entre los dos planteles suman 178.1 millones de dólares) se ven las caras y ya deben comenzar a dar resultados.
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