El tiempo sigue su marcha y la portería tricolor luce experimentada, segura, pero con un futuro incierto. Pasan los torneos y hay una pregunta que se mantiene, ¿Qué sigue en el arco de la Selección Mexicana después de Guillermo Ochoa , Jesús Corona, Alfredo Talavera o el mismo Jonathan Orozco?
Si bien en el Clausura 2020 sólo cuatro equipos tienen en su portería a un extranjero como titular indiscutible ( Nahuel Guzmán , Tigres; Camilo Vargas , Atlas; Marcelo Barovero , Rayados y Nicolás Vikonis , Puebla), la consolidación de los arqueros jóvenes sigue siendo una incógnita. El argentino Oscar Ustari divide la participación con Alfonso Blanco en Pachuca, caso similar al del uruguayo Sebastián Sosa y Luis Malagón en Morelia.
Nombres como Carlos Acevedo (Santos), Sebastián Jurado (Cruz Azul), Luis García (Toluca), Luis Cárdenas (Rayados) o José Hernández (Atlas) han llevado la etiqueta de “promesas”, pero todo se mantiene ahí. Otros como Hugo González (Necaxa), Gibrán Lajud (Xolos) o Rodolfo Cota (León) tienen recorrido en Primera División, pero sigue sin ser suficiente.
En entrevista para EL UNIVERSAL Deportes, Adolfo Ríos , histórico exarquero del América, señala que la falta de competencia y la carencia de proyectos en la portería a nivel de clubes ha mermado el surgimiento de más guardametas.
“ Tema que se ha llevado torneo a torneo. Creo que las camadas de porteros en México están a la baja. Desafortunadamente el trabajo de especialista de porteros en equipos mexicanos no es tomado en cuenta como debería ”, declaró Ríos , quien considera que falta una mayor disputa para llegar al Tricolor.
“ Desafortunadamente no hay una baraja interesante de porteros que puedan competir ahorita y que te dé la posibilidad de ser mejor y luchar por llegar a la Selección Nacional ”, explicó el Arquero de Cristo.
Guillermo Ochoa
es el único guardameta mexicano que ha emigrado al futbol europeo y Ríos atribuye ese logro a la mentalidad y calidad del canterano azulcrema.
“ Él tomó el reto. Eso no es poca cosa, ahora hay un prestigio que se ha ganado y con base en picar piedra, porque cuando las cosas se pusieron duras él no renunció. El regresó a México no por haber fracasado, regresó por una oferta mejor así lo decidió ”, aseveró.
Sin embargo, considera que muchas veces también los clubes son los que ponen las trabas para que los jugadores cumplan el sueño europeo. Así le pasó a él cuando fue buscado por un club europeo.
“ Hubo un acercamiento de un equipo europeo cuando yo estaba en Veracruz. Fue complicado por las mismas trabas que ponía el club. Lo único que puedo decir es que fue un equipo francés y cuando la directiva les dijo lo que pedían no llamaron más. No sé si la competencia era distinta, pero ahora los porteros tienen que estar mucho mejor preparados ” finalizó.