Más Información
Hace poco más de un año, hubo una reunión entre Gianni Infantino , presidente de la FIFA y Yon de Luisa , máximo dirigente de la Federación Mexicana de Futbol.
En esa reunión y según palabras del propio de Luisa, Infantino pidió entre otras cosas a corregir en México: "Eliminar la multipropiedad".
Hoy, ambos finalistas de la Liga MX , son parte de un consorcio que tiene más de un equipo compitiendo en la Primera División.
Atlas
es administrado por Grupo Orlegi , que también controla los destinos de Santos Laguna.
León es parte de Grupo Pachuca , que de igual forma lleva los hilos de los Tuzos del estado de Hidalgo.
Ambos, ejemplos claros de la multipropiedad , esa que quiere eliminar la FIFA.
ORLEGI
Orlegi
fue fundado en el 2013 pero ya desde el 2006, cuando Alejandro Irarragorri asumió la presidencia de Santos, se comenzaba a gestar la creación de la empresa. El primer paso fue comprarle el equipo a Grupo Modelo. En el 2016 se hicieron del Tampico Madero de la hoy Liga de Expansión y desde el 2019 se hicieron cargo de la administración del Atlas.
Orlegi Sports
se define como: "Un modelo de innovación en el deporte para que vivas la pasión del futbol a través de experiencias únicas e innovadoras que están en constante evolución".
GRUPO PACHUCA
En 1995 Jesús Martínez Patiño compró al Pachuca, equipo en la Segunda División , y comenzó a generar todo un imperio que forjó con la ayuda de varios grupos políticos en el estado de Hidalgo. El equipo se mantuvo en primera, los proyectos de consolidaron y comenzaron a expanderse. En el 2010 compró por 4 millones de dólares al León que en ese entonces estaba en la Liga de Ascenso. Hoy, el grupo también es propietario de los Mineros de Zacatecas , además de tener acciones en otros equipos de Sudamérica.
NO ES NUEVO
Esto de la Multipropiedad , no es nuevo en México. Ya hubo hasta finales del futbol mexicano marcadas por una polémica mucho más puntual en ese aspecto, como la del Verano 2002 entre América y Necaxa, donde ambos equipos eran propiedad de Televisa. La leyenda urbana habla que al medio tiempo, con una ventaja de 2-0 a favor de los Rayos, hubo una llamada desde lo más alto para cambiar el rumbo del juego... Algo que nunca ha sido probado y desmentido por los protagonistas de aquella final.
LEE TAMBIÉN: Selección Mexicana confirma la convocatoria para el amistoso ante Chile
