Aunado a perderse la mini concentración con la , de cara al Preolímpico, y a no jugar con las Chivas los partidos contra el Pachuca y los Pumas —como mínimo—, Uriel Antuna tiene otra gran preocupación: demostrar que su recontagio de Covid-19 no se debió a alguna irresponsabilidad de su parte.

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A pesar de que la directiva del Guadalajara le realizará una última prueba PCR para descartar un “falso positivo”, el chico deberá explicar cómo volvió a contraer el virus, porque —si fue por negligencia— sería multado con 100 mil pesos.

 

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