En marzo de 2018 comenzó a anunciarse que el estadio Azul , sede del Cruz Azul , sería demolido, para levantar un centro comercial en ese lugar. Ahí se construiría un proyecto llamado Artz Insurgentes Sur .
Esto pondría fin a un inmueble que fue construido en 1944 y que abrió sus puertas en 1946 para albergar juegos de futbol americano y después de futbol, siendo sede de equipos como Necaxa , Cruz Azul , América , la misma Selección Nacional y claro, el Atlante .
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Los Potros de Hierro
volverán ahí el domingo, en su reaparición en la Ciudad de México desde que se fueron en el Verano 2002, siendo su último juego en el inmueble contra Tigres el 27 de abril de ese año, venciendo 2-1 a los regios.
El estadio fue parte del proyecto urbanístico denominado Ciudad de los Deportes y al paso de los años se volvió un monumento, que por momentos estuvo en peligro de irse, pero el proyecto urbanístico no avanzó.
El estadio sigue en pie, y seguirá porque su uso de suelo es para actividades deportivas, y se mantendrá así, hasta que la ley determine otra cuestión.
Santiago Taboada
, alcalde de la Benito Juárez , donde está enclavado el estadio, en entrevista con EL UNIVERSAL Deportes , señaló que la gente de la demarcación está contenta por el regreso del equipo azulgrana y sobre todo, porque se respetó la ley: “Estamos contentos porque de las cosas que planteamos en el proceso electoral, es que queríamos que se mantuviera el espacio deportivo y se respetara el uso del suelo, que en ese espacio se respetara la vocación de origen, que es para la práctica de deportes y espectáculos públicos”.
No hubo necesidad de llegar a tribunales: “Lo único que planteamos y lo dijimos con el propietario [la familia Cossío] es que nosotros íbamos a respetar la ley con mucha firmeza, y eso debe estar claro para inversionistas y vecinos, lo que está reglamentado y constituido lo vamos a respetar.
Mi gobierno se mantendrá en eso con el inmueble y si se pueden hacer mejoras adelante, que sea un espacio deportivo y de espectáculos, lo que le viene bien a la zona, porque es una zona de una gran actividad comercial. Además el estadio es muy céntrico, y ahora que vuelve el Atlante se van a revivir los días futboleros”, afirmó.