La estructura de futbol que tiene Leones Negros , estaba encaminada a cuando se diera el regreso a la Liga MX , todo estuviera en orden en todas sus divisiones, jamás dejaron de trabajar estando en el Ascenso y también tenían su equipo de mujeres, con estructura firme.
Leones Negros
está en pie de lucha para defender sus derechos, porque están seguros que las decisiones tomadas van en contra de la legalidad, que se están favoreciendo algunos y no se tomó en cuenta el punto de vista de los involucrados, porque fue una ley a rajatabla.
Por lo anterior, Leones Negros iría a tribunales para defender sus derechos, en espera que otros equipos hagan lo propio y ya comenzaron reuniones para estudiar el caso, con un grupo de abogados, así lo dieron a conocer en un comunicado.
“Sólo hay una ley y una verdad: la de ellos. Es la fuerza por encima de la razón.
Hacemos un reconocimiento a los directivos de la Liga Premier y TDP por mantener la congruencia y no votar la eliminación del ascenso y descenso”.
“Por lo anterior, el patronato Leones Negros de la Universidad de Guadalajara analizará, con un equipo de abogados, la validez y legalidad de las decisiones tomadas y, en los próximos días, daremos a conocer nuestra postura al respecto así como las acciones que habremos de emprender, siempre dentro del marco de la ley”.
Señalan en Leones que la determinación tomada, fue “a la ligera, de manera apresurada y sin cuidar siquiera las formas. Leones Negros representa a una casa de estudios y nunca estaremos a favor del autoritarismo, la prepotencia y la imposición de ‘acuerdos’ sin escuchar a las minorías. Por el contrario, siempre estaremos a favor del consenso, de la legalidad, de la legitimidad, de la libertad de expresión, el derecho a disentir y sobre todo a favor de la justicia. El ejemplo que nos han dado, no representa en lo absoluto “el juego limpio” que tanto se ha pregonado”.
El comunicado también señala lo siguiente:
Una vez realizada la asamblea general de la FEMEXFUT y dadas a conocer sus resoluciones, queremos manifestar lo siguiente:
Se determinó compensar la terminación anticipada del actual torneo con una distribución de 60 millones de pesos entre los 12 equipos del Ascenso; lo que servirá para completar el pago a los jugadores. Pero, a cambio, se aniquilan sus ilusiones y aspiraciones deportivas. Nadie ascenderá esta temporada 2019-2020.
Otros 240 millones de pesos se otorgarán anualmente por las siguientes 6 temporadas (Equivalentesa 20 millones de pesos anuales por Club) que representan en realidad el pago que recibiremos a cambio de “suspender” el ascenso y descenso hasta el 2026.
Estos recursos económicos no serán suficientes para “apoyar el crecimiento de los clubes”, porque no compensan la disminución de ingresos que tendremos por patrocinios que apostaban por el ascenso de nuestros equipos, ni la disminución de ingresos por la venta de mercancías, boletaje y esquilmos.
Pero sobre todo, esos millones de pesos nunca compensarán la desilusión de nuestra afición al ver cortadas sus esperanzas de acompañar a su equipo para ganarse deportivamente un lugar en la máxima categoría del futbol mexicano.
Gracias a esta decisión, seguirán siendo solo 14 ciudades importantes con futbol de primera división y más de 40 plazas las que no podrán soñar más con ver algún día a su equipo jugar contra los grandes de México.
Con las decisiones avaladas en la Asamblea Extraordinaria de la Federación Mexicana de Futbol, quedó de manifiesto que hay un sector en el balompié mexicano que tiene los votos necesarios para decidir lo que quieran, sin escuchar otras voces, ni atender otros argumentos.
En este tema hubo tantas voces autorizadas de jugadores, técnicos y analistas que se manifestaron en contra de la desaparición o suspensión del ascenso y descenso y, sin embargo, no fueron escuchadas.
Tenemos claro que quienes empujaron el “Plan General de Rescate del Ascenso” buscaron siempre un objetivo: evitar que algún equipo ascendiera deportivamente desde esta misma temporada y hasta el 2026. Parece que lo están logrando, valiéndose de la artimaña de “suspender temporalmente el ascenso y descenso por las próximas seis temporadas”.