Más Información
Tres de cada 10 estudiantes es víctima de violencia en planteles; exigen reforzar medidas de seguridad
Unión Nacional de Padres urge a acabar con clima de inseguridad en Sinaloa; exigen esclarecer asesinato de su líder
“Aún hay tiempo”: Inai lamenta extinción aprobada por Diputados; pide al Senado reconsiderar reforma
Oposición se lanza contra extinción de órganos y elección judicial; diputada de MC llama a interponer controversia constitucional
Diputados avalan súper secretaría de García Harfuch; SSPC investigará delitos y coordinará inteligencia a nivel nacional
Ahora que la Ciudad de México y el Estado de México han regresado a semáforo rojo dentro de la pandemia por coronavirus vuelven las incongruencias en lo que a deporte se refiere. Se supone, porque así lo dijeron las autoridades sanitarias, que con dicho color no era posible llevar a cabo partidos de futbol, pero eso no parece importar en estos momentos.
¿Por qué? Simple, la final de la Liga de Expansión (antes el Ascenso MX y que no da ascenso a la Primera División) se llevará a cabo como estaba programada. Atlante recibe al Tampico Madero en el estadio de la Ciudad de los Deportes. Una total incongruencia cuando otros eventos deportivos como la Lucha Libre han cancelado funciones como la del 25 de diciembre.
LEER MÁS
: Miguel Herrera explicó la situación de Carlos Vela
La teoría dice que ningún evento debería llevarse a cabo, pero como la final entre los Potros de Hierro y la Jaiba Brava es el último juego de la liga en el año, parece que no quieren postergarlo o dejarlo vacante.
Lo difícil será controlar a los aficionados atlantista que fueron al estadio en la semifinal ante el Atlético de Morelia y que estuvieron cantando y juntándose todo el partido de la semana pasada. Esa será la principal labor de las autoridades, dispersar a los seguidores que se brinquen las restricciones para ir al estadio.
En fin, urge terminar con el futbol en este 2020, aunque eso signifique saltarse el semáforo rojo en la CDMX.